De abril a julio de 2020, el programa de apoyo de la banca ante la emergencia se concentró en el diferimiento de capital e intereses beneficiando a más de 8.6 millones de personas con créditos cuyo valor se estima en 1.1 billones de pesos.
Cabe destacar que la iniciativa de crear este tipo de acciones se remonta a otros periodos álgidos como la crisis del subprime (2008), por el virus AH1N1 (2009), la crisis de las desarrolladoras en 2013 y la crisis tras los sismos de 2017.
En lo relacionado con el crédito hipotecario, cerca de 130 mil acreditados de un universo de 700 mil, usaron el apoyo del sector bancario. Que solo 20% de la cartera lo utilizara es un indicador muy positivo, principalmente porque muchas personas aprovecharon el apoyo como una medida preventiva ante la incertidumbre que el freno en la economía generó en el país.
Este escenario revela que la banca ha originado créditos hipotecarios de forma responsable en los últimos 15 años y que, a quienes otorga financiamiento, son personas con buena capacidad de pago aun frente a adversidades. Asimismo, confirma que los mecanismos de protección al acreditado —como el caso del seguro de desempleo a quienes acreditan ingresos a través de nómina— funcionan bien.
En este sistema hipotecario sólido donde prácticamente se otorgaron 10% menos créditos que en 2019, es destacable que el monto haya subido casi 2%, lo que implica que el valor promedio del crédito otorgado es de 1 millón 620 mil pesos y esa es una buena noticia porque quiere decir que más personas con mayor poder adquisitivo cada vez utilizan en forma más eficiente el crédito hipotecario.
En mi opinión, todo este contexto es síntoma de un mercado hipotecario estable. Pienso que veremos revertirse muchos de los efectos negativos de la pandemia con el avance de la vacunación, el seguimiento de medidas de higiene y distanciamiento responsables, lo cual hará que eventualmente ascienda el ritmo de operaciones y el valor de las mismas.
¿Qué hacer para seguir favoreciendo la colocación de créditos y la venta de vivienda?
Hay algunas acciones que recomendaría implementar con el fin de impulsar todavía más la actividad hipotecaria e inmobiliaria, recordemos que el crédito hipotecario es un detonador del sector inmobiliario a nivel mundial y vislumbrar un sector inmobiliario sin el apoyo sólido de la banca sería impensable.