AMLO: "Quieren poner a pelear a Marcelo con Claudia" | #EnSegundos
Por lo general, los jefes de estas familias cuentan con educación superior, ahorran una parte de su ingreso y laboran en el sector formal, por lo que pagan su porción correspondiente de impuestos.
La clase media conecta a la base y a la punta de la pirámide social. Impulsa el crecimiento económico y equilibra la democracia. Este grupo no desea turbulencias políticas que pongan en riesgo su situación socioeconómica, por lo que optarán por gobiernos que ofrezcan más cohesión y estabilidad.
Una clase media sólida promueve el desarrollo del capital humano, crea una demanda estable de bienes y servicios, cultiva a la siguiente generación de emprendedores y apoya a las instituciones democráticas. Son los que constantemente unen sus voces para exigir condiciones que les permitan alcanzar sus metas.
No es que sean fáciles de convencer, sino que su pensamiento crítico les permite visualizar las condiciones que quieren ver reflejadas y castigar a quienes no las proveen. Este gobierno no debe repetir el error de sus antecesores de ignorar la voz de esta clase y apelar principalmente a la clase baja, pues la clase media siempre buscará a quien quiera escuchar.
Nada de lo anterior es novedad. Aristóteles pronunció, milenios atrás, que la mejor comunidad política es aquélla en la que la clase media posee el control y supera a las otras dos. El propósito del presidente al dirigir su furia a la clase media es desconocido. Si su intención es justificar la derrota en la CDMX en vez de asumir las consecuencias de sus omisiones, subestima la capacidad de exigencia de la ciudadanía.
Si su deseo es desviar la atención y proteger a sus contendientes para la presidencia en 2024, la estrategia puede ser contraproducente, pues la clase media puede virar la inercia hacia la alternancia política.
Deslindarse de las responsabilidades de una soldadura deficiente en el metro, o de las gestiones de sus protegidos, puede resultar en un desgaste de los pernos que sostienen a la estructura de nuestra estructura sociopolítica. El colapso del vagón trajo un impacto adverso e irremediable para muchas personas; el de nuestra democracia traería sendas consecuencias para nuestro país.
Nota del editor: Antonio Michel estudió Relaciones Internacionales en el ITAM, donde es profesor, y tiene una Maestría en Administración Pública por la Universidad de Maxwell. Trabajó casi 7 años en la Administración Pública Federal, en las secretarías de Relaciones Exteriores, Desarrollo Social, Energía y Gobernación. Su pasión son los asuntos internacionales, los asuntos políticos y la administración pública. Síguelo en Twitter y en LinkedIn . Las opiniones publicadas en esta columna pertenecen exclusivamente al autor.
Consulta más información sobre este y otros temas en el canal Opinión