La preocupación por el calentamiento global empieza a tomar fuerza en las grandes ciudades de vanguardia desde la prohibición del uso de bolsa de plástico hasta prohibir el uso de los popotes, también activistas como Greta Thunberg difunden iniciativas con hashtags para que los gobiernos del mundo luchen contra el cambio climático, con estas acciones posiblemente en los próximos años veremos un aumento en el auge de autos eléctricos.
Al igual que los vehículos convencionales, una de las características más importantes de estos novedosos autos eléctricos es la distancia que podrían recorrer con la cantidad de combustible que le suministramos, es decir al igual que nuestros demás dispositivos electrónicos estos autos se están midiendo por el tipo de duración de la carga de la batería, así como el tiempo que le toma recargarse a ésta, lo que está llevando a los fabricantes a desarrollar la batería más óptima para estos vehículos.
Las baterías de litio han mostrado mejores capacidades que las de plomo y níquel, ya que tienen mayor capacidad de almacenaje de energía en menor volumen y una carga más rápida. Actualmente esta tecnología ya está siendo utilizadas por las automotrices mundiales, entre las que destacan los vehículos eléctricos como Nissan y Tesla.
Aunque el litio se usa para fabricar baterías ya desde hace varios años, la incorporación de estas fuentes de energía en los vehículos eléctricos está provocando que se piense que el litio será la próxima materia prima que sustituya al petróleo, aunque todavía no está muy claro porqué se cree esto, ya que la relación que hay entre los autos convencionales con el petróleo es la gasolina y más bien lo que estaría sustituyendo a ésta es la energía eléctrica.
En el hipotético caso de que se deje de usar gasolina se tendría que buscar más bien una fuente de energía eléctrica para abastecer la demanda de este insumo que actualmente es más del 50% de la electricidad generada en el mundo y que es producida con algún combustible fósil.