En semanas recientes el gobierno federal decidió otorgar subsidios a este último, los cuales incluso han alcanzado hasta un nivel de 100%, implicando una reducción de ingresos fiscales, ¿esta estrategia es sostenible con el objetivo de contener los precios de la gasolina al público?
En la Ley de Ingresos de la Federación, el IEPS Federal representa más de 7.0% de la recaudación por concepto de impuestos del Gobierno Federal. Un porcentaje de estos ingresos se encuentran destinados a cubrir ciertas erogaciones como lo son, por ejemplo, las participaciones y aportaciones a entidades federativas y municipios.
Una recaudación de ingresos tributarios inferior a lo establecido en la Ley de Ingresos derivaría en la utilización de los fondos de estabilización con lo que cuenta el Gobierno Federal al no llegar a la recaudación estimada. Mismos que se han visto significativamente disminuidos en los últimos años, particularmente durante el 2020, tomando en cuenta el impacto de la pandemia.
Asimismo, se podría comprometer el Presupuesto de Egresos de la Federación, el cual ya contiene un techo de endeudamiento superior a 3.0% del PIB.
No obstante, es importante resaltar que los Criterios Generales de Política Económica empleados para la elaboración de la Ley de Ingresos y Presupuestos de Egresos fueron aprobados con un precio promedio de la mezcla mexicana de exportación (MME) de 55 dólares por barril, en un contexto muy distinto al actual.
En las últimas semanas, el precio de la MME ha mostrado niveles superiores a los 80 dólares por barril, con lo cual, considerando las transferencias del Fondo Mexicano del Petróleo se podría mitigar, al menos parcialmente, el impacto del subsidio otorgado al IEPS Federal de las gasolinas.
Actualmente existe volatilidad en los precios del petróleo considerando diversos factores, entre los cuales destaca la normalización de las activades económicas y por ende el incremento en la demanda de combustibles, las tensiones entre Rusia y Ucrania, la reducción en el volumen de inventarios a nivel global, así como potenciales modificaciones en la producción por parte de la OPEP.