Vas a un curso de emprendimiento, pero a la hora de hacer tu plan de negocios, tu modelo o tu pitch, te das cuenta de que no logras aterrizar los nuevos conocimientos. Lo mismo en la pista de atletismo que en los negocios, no basta con entender racionalmente las cosas, el reto es integrarlas a nuestras acciones.
Aprendí mucho cómo hacer esa conexión hace unos tres años, cuando mi maestro de atletismo, el profesor Margarito Alonso, quizá desesperado por mi mala coordinación, se puso a correr a un lado de mí y decirme: -No pienses tanto, solo imítame, imita mis movimientos.
Yo volteaba de reojo y sin más, iba imitando al levantar la pierna, abrir la zancada y hasta respirar. Y ese es el primer tip que te recomiendo integrar a tu vida profesional para mejorar tu desempeño.
1. Modela. Le puedes llamar modelar, es decir, imitar a alguien, porque según nos dice el autor Robert Dilts, cuando imitas conscientemente a otro inconscientemente vas asimilando nuevas formas, cambiando patrones.
Hace 25 años empecé a aprender a hablar en público, imitaba cada movimiento de manos y cambio de voz de mi maestro, el señor Alfonso Tessada; es más, llegué a copiarle los argumentos y hasta decir sus anécdotas como si fueran mías.
Con el tiempo, una vez que dominé el arte de estar frente a un público dejé las anécdotas y movimientos del señor Tessada, pero jamás hubiera encontrado mi estilo sin modelarlo.
En aquella actividad en la que quieres mejorar tu desempeño, no solo escuches a las personas, imita a los mejores, porque si solo los escuchas es probable que muchas veces ni siquiera ellos sepan lo que están haciendo, porque cuando alguien hace algo tan bien, es porque ya lo tiene automatizado, es una conducta no consciente, entonces te contestará lo que cree que hace, pero si quieres saber su verdadero patrón, modélalo, imítalo y ya que domines la habilidad busca tu estilo.
¿Sabes a quién debes modelar para elevar tu desempeño?
2. Pide feedback. Las personas que integran nuevas habilidades con agilidad no tienen miedo de que los retroalimenten, al contrario, están ansiosos de escuchar nuevos puntos de vista. Cuando modelamos se busca imitar a los que son mejores haciendo lo que queremos aprender, pero al pedir feedback no necesariamente tenemos que buscar a los de mejor desempeño, es diferente que el modelaje.
Por ejemplo, un bailarín puede pedirle feedback a una maestra que ya no baila y que no necesariamente era la mejor bailarina en su momento, porque al modelar se valora el desempeño del otro, pero la retroalimentación nos regala la capacidad de observación y el conocimiento técnico, por eso es un comentario erróneo decir; “yo solo escucho retroalimentación de quienes son buenos o dominan la actividad”.
¿A quién valdría la pena pedirle retroalimentación hoy? ¿Existe alguna persona que te cae mal, pero que tal vez te pueda ayudar a elevar tu desempeño? No pienses si será una crítica constructiva o destructiva, una persona que quiere mejorar realmente va a absorber lo mejor, tomar lo que le haga sentido y no aplicar lo que no considere adecuado.
Hay gente con conocimientos muy valiosos y que es totalmente cavernícola para dar retro, pero si quieres mejorar, vas a extraer lo mejor sin tomártelo personal, sino imagínate, para mejorar vas a necesitar jefes perfectos, padres perfectos, entrenadores perfectos ¡No!
Resignifica rápido, aprovecha lo que te sirva, no esperes que la gente sepa de tu pasión y aparte tenga una maestría en cómo decirte las cosas.