Publicidad
Publicidad

De la gran renuncia a la gran realización: ganar-ganar antes de la debacle

Una forma en que las empresas pueden prevenir una renuncia y, por el contrario, activar una revalorización laboral son los retos, considera Fernanda Legaspi Yáñez.
dom 08 mayo 2022 07:00 AM
De la gran renuncia a la gran realización: ganar-ganar antes de la debacle
Las grandes vacantes que se están suscitando a lo largo y ancho del mundo debido a la gran renuncia están siendo ocupadas por talento latinoamericano, señala Fernanda Legaspi Yáñez.

(Expansión) - Los cambios de vida inducidos por la pandemia han provocado un reajuste del equilibrio entre el trabajo y la vida privada para muchos. Mientras unos se reubican y otros deciden cambiar sus metas y objetivos, hoy en todo el mundo se habla de una "gran renuncia".

De acuerdo con el Departamento del trabajo de Estados Unidos, de febrero del 2021 al 2022, se ha incrementado en 11% el número de personas que abandonan sus trabajos, ¿cómo pueden las compañías tecnológicas prevenir este fenómeno?

Publicidad

Independientemente de que esta ola llegue o no a México, las empresas pueden prevenirse a través de la misma tecnología y el uso de data. De acuerdo con el Reporte del Mercado Laboral de TI 2022 , de Hireline, 41% de los profesionales en tecnologías de la información mexicanos cambiaron de empleo hace menos de un año, mientras que 53% tienen la intención de buscar un nuevo empleo en este año; particularmente, 36% de los profesionales de tecnología renunciaron voluntariamente a su empleo anterior por no tener una compensación adecuada.

Las grandes vacantes que se están suscitando a lo largo y ancho del mundo debido a la gran renuncia están siendo ocupadas por talento latinoamericano, pues de acuerdo con “ State of Global Hiring Report 2021 ”, estudio elaborado por Deel, la tasa de crecimiento de la contratación en la región creció 286%, siendo los ingenieros los más demandados.

Los números reflejan un fenómeno ulterior: por primera vez en la historia los empleados son los que deciden voluntariamente renunciar, cambiando con ello el curso de su carrera laboral, persiguiendo nuevas metas y explorando nuevos enfoques. La gran renuncia es solo el síntoma de la gran realización laboral que infunde valor a los empleados.

Los trabajadores ya no quieren volver a las costumbres pre pandémicas

Una mezcla renovada de las aspiraciones de vida con una autoconciencia de exactamente qué es lo que se quiere da cabida a un nuevo reto empresarial: la demanda por propuestas de valor híper personalizadas se hace presente, lo que conlleva el riesgo de una turbulencia presupuestaria y de recursos.

Aspectos en común, como el trato humano, cercano y transparente, la flexibilidad, cultura incluyente, retos para el crecimiento e incentivos para el bienestar holístico, son una buena manera de crear lazos duraderos que trascienden incluso las barreras laborales, pero que al mismo tiempo motivan a los empleados a “tatuarse la camiseta”, pues empata su crecimiento personal con el corporativo.

Una forma en que las empresas pueden prevenir una renuncia y, por el contrario, activar una revalorización laboral son los retos. “Cuando las personas se ven motivadas por su crecimiento personal, se encuentran en un ambiente que las invita a superarse constantemente”, comenta al respecto Brian Salomaki , Site Lead de Lyft.

Publicidad

“Retar a los empleados consiste en darles la oportunidad de reflejar sus ideas y habilidades en mejoras que impacten en la vida de otras personas para bien; con cada reto se demuestra cuán importantes son y renueva la confianza que se deposita en cada uno de ellos”, apunta Salomaki.

Las acciones reactivas de reclutamiento, contratación y retención poco a poco prueban ser poco útiles ante estos cambios. Las herramientas y plataformas tecnológicas que sirven de puente para los deseos de los profesionales con el trabajo de sus sueños retoman protagonismo, pues también se tornan en útiles aliados para empoderar al departamento o especialistas en RH a fin de eficientizar sus procesos.

La relación entre la compañía y sus empleados es puesta bajo la línea de fuego. La gran renuncia no es un efecto retardado de la pandemia o de la nueva normalidad, es un síntoma de una fuerza laboral renovada, que tiene en primer lugar al empleado con sus valores y convicciones muy por delante, el momento de apostar por la fuerza de los empleados ha llegado y no podemos hacer omisión de ello.

Nota del editor: Fernanda Legaspi Yáñez es Founder & CEO de Ronin PR. Síguelo en LinkedIn . Las opiniones publicadas en esta columna pertenecen exclusivamente al autor.

Consulta más información sobre este y otros temas en el canal Opinión

Publicidad

Newsletter

Únete a nuestra comunidad. Te mandaremos una selección de nuestras historias.

Publicidad

Publicidad