(Expansión) - La responsabilidad de la industria con respecto al equilibrio en el uso de los recursos y el cuidado del medio ambiente ha crecido considerablemente en los últimos años. El papel que jugarán las tecnologías de la información para lograr dicho balance será crítico y fundamental. Producir bienes y servicios ya no requiere solo del cumplimiento con costos, satisfacción del cliente o rendimientos para los accionistas; ahora es básico también que cumpla con compromisos con la sociedad y el medio ambiente.
Sustentabilidad y tecnología, binomio para empresas responsables
Los indicadores de sustentabilidad son tan importantes para las empresas en la actualidad como lo es su desempeño financiero y de negocio.
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La sustentabilidad en las empresas considera una serie de factores e indicadores a los que debe darse un seguimiento puntual, el cual considera información detallada, oportuna, visible y disponible en todo momento. Determinar y disminuir la huella de carbono generada por cada producto, desde la extracción y traslado de su materia prima, hasta la entrega y disposición posterior a su vida útil, es uno de los muchos retos éticos conjugados con la viabilidad financiera a los que hoy se enfrenta todo industrial.
La nueva generación de sistemas físicos integrados con tecnología digital permite controlar al máximo los indicadores clave (KPIs) diseñados para mantener a las empresas bajo estándares sustentables, tales como gasto de energía, seguimiento de la huella de carbono (lo cual involucra tanto productos como recursos), factores de reciclaje y control de desperdicios; por mencionar solo algunos.
Gracias a la extracción de esta información, generada en elementos y ambientes físicos, se pueden establecer operaciones de analítica en sistemas digitales que luego regresan para ser aplicados a procesos de mejora en el ambiente físico. Esta interacción entre lo físico y digital es lo que está permitiendo a las empresas ser más eficientes y, por ende, competitivas.
Los indicadores de sustentabilidad son tan importantes para las empresas en la actualidad como lo es su desempeño financiero y de negocio. Tan es así, que para las empresas que cotizan en Bolsa o que están en búsqueda de inversión, tienen que cumplir con Objetivos de Sustentabilidad (ODS) básicos, pues demuestra con ello su compromiso con el medio ambiente, con la sociedad y con las generaciones futuras.
La importancia de lo anterior quedó demostrada en 2020, cuando debido al inicio de la pandemia, se entró en un proceso de confinamiento que paralizó al mundo, pero también registró una caída de emisiones de gases invernadero. Datos de la UNEP (Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente) indican que, en el mundo, las emisiones de CO2 de origen fósil presentaron un descenso de 1.98 GtCO2 (5.6%) en 2020 debido a la crisis de Covid‑19.
No obstante, en 2021 los niveles de contaminación volvieron a los niveles previos a la pandemia. Esto obliga a empresarios e industriales a seguir desarrollando una consciencia de cuidado del medio ambiente sin descuidar el desempeño financiero, lo cual será posible con el incremento y afinamiento de indicadores de eficiencia operativa (OEE).
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Un sector clave para el cuidado del medio ambiente es el de servicios públicos. Ya sea la gestión del agua, como la generación y distribución de energía, presentan enormes oportunidades de optimización y con ello de eficiencia operativa y ahorro de recursos que conllevan a economías sustentables.
En México se estima que existen 27 operadoras de agua que proveen el servicio a más de 38 millones de usuarios. En muchas se realizan también operaciones de tratamiento de agua, así como de bombeo y distribución para ciudades o irrigación en campos agrícolas. Estas operaciones demandan una gran cantidad de energía que, sumada al propio recurso que gestionan, puede ser optimizada gracias a sistemas de tecnologías de información e incluso de inteligencia artificial que reducen la utilización innecesaria de energía o advierten de fugas de manera inmediata.
Lo mismo ocurre, por ejemplo, con la distribución de combustibles, tanto gasolinas como gas. En México son seis las empresas que distribuyen gas y que invierten una gran cantidad de recursos para asegurar el suministro. Los sistemas de información y de recolección de datos, tal como lo mencionado en el caso de recursos hídricos, pueden advertir de fugas y derrames a partir del control de flujo y de presión, y evitar así pérdidas millonarias, no solo por el combustible perdido, sino también porque permiten evitar posibles accidentes que hacen exponenciales los daños y las pérdidas económicas (sin considerar que puede involucrar pérdidas humanas).
Más de 700 empresas se han sumado al llamado Pacto Mundial por México, que busca alcanzar los objetivos de desarrollo sustentable y emisiones de la ONU para 2030. Esto muestra un camino importante por recorrer en materia Transformación Digital enfocada a lograr una sustentabilidad corporativa basada en la inteligencia, así como de la incorporación de sistemas que coadyuven a la creación de una cultura que vincule los indicadores financieros y operativos de las empresas con los de sustentabilidad.
Nota del editor: Óscar Díez es Director General de Indra y Minsait en México. Síguelo en LinkedIn . Las opiniones publicadas en esta columna corresponden exclusivamente al autor.
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