Según estadísticas de la Organización Mundial de Propiedad Intelectual ( WIPO , por sus siglas en inglés) hasta septiembre de 2022, 46.6% de las solicitudes mundiales de patentes provenían de China y muy por debajo le siguen Estados Unidos (17.4%) y Japón (8.5%).
Las patentes de las empresas chinas se concentraron en tres rubros: en primer lugar, la tecnología computacional; en segundo, la comunicación digital y en tercero la maquinaria eléctrica, aparatos y energía.
Específicamente sobre la tecnología 5G, China lidera como país la lista de patentes concedidas con 21% del total a nivel mundial - con la suma de la producción de un número reducido de empresas -, según datos de IPlytics . También en el desarrollo de esta tecnología móvil se percibe el dominio de las empresas asiáticas, pues cinco compañías de esa región se encuentran en los primeros ocho lugares de patentes concedidas.
En cambio, Estados Unidos únicamente tiene una empresa con 12.9% de las patentes de esta tecnología entre los ocho primeros lugares en patentes 5G en el mundo, dos empresas europeas (nórdicas) se cuelan en esa lista.
Más que una competencia donde China y Estados Unidos se ponen el pie y responden con igual magnitud de restricciones a las decisiones del otro, su cooperación acelerará el desarrollo de las industrias, la expansión de la conectividad efectiva y el beneficio económico global.
La importancia de fortalecer el despliegue de 5G es más que un tema de dominio tecnológico, se trata de la nueva “máquina de vapor” en la cuarta revolución industrial por sus beneficios económicos.