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La Fórmula de la Paz de Zelenski, un rayo de esperanza en un contexto sombrío

Algunos siguen intentando afirmar que la invasión de Ucrania es un conflicto local. Pero la verdad es que Rusia está en guerra con el mundo entero.
mié 13 septiembre 2023 06:08 AM
El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, escucha durante una conferencia de prensa con el primer ministro británico, Rishi Sunak, en el jardín de Chequers el 15 de mayo de 2023 en Aylesbury, Inglaterra.
El presidente Zelenski propuso su Fórmula de la Paz en la cumbre del G7 del pasado noviembre, y desde entonces otros países que respetan incondicionalmente la independencia, la integridad territorial y la soberanía de Ucrania se han unido a él, señala Andriy Yermak.

(Expansión) - La guerra agresiva de Rusia contra Ucrania es un capítulo trágico y prolongado de la historia moderna. Nunca olvidaré los rayos de Sol que iluminaban el altar del templo principal de Odesa, destruido por un misil ruso. Personas de distintos credos y orígenes étnicos limpiaron los escombros -juntos- porque ése ha sido el ethos de nuestro país desde el principio de los tiempos: somos diferentes, pero estamos unidos.

Odesa, ciudad de más de 130 nacionalidades, es la ciudad gemela de Yedda, Génova, Liverpool, Marsella, Estambul, Haifa, Gdansk, Ereván, Chisinau, Qingdao y Vancouver. No quisieras que tu hermana tuviera que imaginar ser sometida a algo así. Pero vivimos en esta realidad, y los ataques no se dirigen sólo a nuestros puertos, sino a todo el mundo. Un cuarto de millón de toneladas de grano destinado a la exportación ha sido destruido. El mundo ya ha notado las repercusiones, con una fuerte subida de los precios del trigo en todo el mundo.

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La búsqueda de la paz por parte de Ucrania no es solitaria; es una sinfonía de coraje, resistencia y una ardiente creencia en la independencia, la soberanía y la integridad territorial. Los ucranianos, como todas las naciones, llevan estos valores muy dentro, y no hay lugar para el compromiso. En Ucrania, luchamos -morimos- por estos valores compartidos. En el fondo, a todos nos une nuestro deseo innato de ser libres.

La comunidad internacional comprende que el mayor conflicto en Europa desde la Segunda Guerra Mundial, que actualmente tiene lugar en Ucrania, está teniendo un impacto negativo no sólo en Ucrania, sino también en la seguridad mundial, la prosperidad y el medio ambiente. Los países de todo el mundo deben aceptar las acciones de Rusia por lo que son -ilegales y destructivas- y centrarse en construir una paz duradera. Algunos siguen intentando afirmar que la invasión de Ucrania es un conflicto local. Pero la verdad es que Rusia está en guerra con el mundo entero.

Las amenazas de Rusia de utilizar armas nucleares contra un Estado no nuclear, las amenazas a la seguridad de las centrales nucleares, las amenazas a la seguridad energética, los grandes daños al medioambiente, los abusos y torturas de militares y civiles capturados y las deportaciones forzosas masivas son pruebas de los espantosos crímenes de guerra que nos han infligido. Rusia está creando una catástrofe humanitaria multifacética, con Ucrania en su centro. Estamos decididos a derrotar al agresor y a librar a nuestro país de los invasores. En el curso de nuestra contraofensiva, ya hemos liberado más de 270 km2 de nuestro territorio. Pero también queremos construir un futuro más seguro tanto para Ucrania como para el mundo.

Tenemos un plan para hacer frente a todas las amenazas que plantea la agresión rusa, y tenemos amigos que comparten nuestro punto de vista. El presidente Zelenski propuso su Fórmula de la Paz en la cumbre del G7 del pasado noviembre, y desde entonces otros países que respetan incondicionalmente la independencia, la integridad territorial y la soberanía de Ucrania se han unido a él en su deseo de aplicar esta iniciativa.

La Fórmula de la Paz, compuesta de 10 pasos, se refiere a la seguridad, la protección y la justicia internacionales. Se basa en los principios fundamentales del derecho internacional y de la Carta de las Naciones Unidas. Por consiguiente, su aplicación equivale a restablecer el respeto de la Carta y de los principios del derecho internacional. Ucrania trabaja codo con codo con la comunidad internacional en la defensa de estas normas fundamentales de la coexistencia mundial.

Estamos luchando, pero somos conscientes de que la victoria y la paz no se conseguirán solas en el campo de batalla. La colaboración y los esfuerzos colectivos son ingredientes esenciales para que esta receta tenga éxito. Por eso hemos desarrollado un modelo en tres etapas para garantizar que la Fórmula de la Paz sea internacional. Ya se trate de la seguridad nuclear, de la seguridad alimentaria o de ayudar a Ucrania a recuperar a los miles de niños que Rusia ha secuestrado, cada Estado puede mostrar su liderazgo según sus capacidades e inclinaciones.

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La primera etapa consiste en reunirse con los embajadores de los países participantes en Ucrania, dedicadas a un examen detallado de cada uno de los puntos de la fórmula. La segunda etapa consiste en reunirse con los asesores de seguridad nacional para definir los mecanismos óptimos de aplicación y preparar recomendaciones para los Jefes de Estado. La tercera y última etapa consiste en la aplicación de un plan común por parte de los Jefes de Estado y de Gobierno. Los líderes comprometidos y valientes podrían pasar a la historia. Su Cumbre Internacional por la Paz debería convertirse en un acontecimiento fundador de los esfuerzos internacionales conjuntos para poner fin a la guerra con justicia. Es la única manera adecuada de hacer frente a la arrogancia y el chantaje del agresor.

A principios de este mes, representantes de más de 40 países asistieron a la reunión de asesores de seguridad en Yedda, el triple que en la anterior conferencia de Copenhague. En la última reunión, 58 embajadores se reunieron en Kiev para debatir los resultados de Jeddah y la continuación de la aplicación de la Fórmula de la Paz. El impulso y el apoyo a la misma van en aumento, al igual que el aislamiento de Rusia. El plan de Ucrania garantizará la seguridad y la justicia para toda la comunidad internacional, no sólo para el propio país.

Hoy no estamos hablando sólo de poner fin a la guerra, estamos hablando del futuro. El pueblo ucraniano nunca olvidará a quienes han estado a su lado todo este tiempo. Aquellos que -independientemente del nivel de las relaciones previas- han apoyado a Ucrania en su justa lucha por la independencia, la soberanía y la integridad territorial. Son verdaderos héroes modernos que traerán la paz a Ucrania y al mundo. No se puede sobrestimar el costo humano de este conflicto, con innumerables vidas perdidas, comunidades desplazadas y economías destrozadas. En medio de este sombrío contexto, nuestra Fórmula de la Paz emerge como el único faro de esperanza y posibilidad.

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Nota del editor: Andriy Yermak es jefe de la administración presidencial de Ucrania. Las opiniones publicadas en esta columna corresponden exclusivamente al autor.

Consulta más información sobre este y otros temas en el canal Opinión.

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