Como bien menciona Freddy Vega de Platzi en uno de sus videos, la decisión del consejo de OpenAI de destituir a Altman, un viernes por la tarde sin haber notificado a nadie fuera del círculo interno, habla de una emboscada que reflejan las tensiones internas y la dinámica de poder dentro de la junta directiva.
¿Qué podemos aprender de un caso de alto perfil como éste? Te comparto algunas de mis conclusiones:
Conoce a los jugadores y sus intereses
Comprender los intereses de las principales partes interesadas, como: cada miembro de la junta, los inversionistas y el mismo Microsoft, es crucial en cualquier negociación. Aquí hay que agregar algo muy importante, no importa cuánto poder creas tener, no hay enemigo pequeño y la junta lo demostró.
Evalúa riesgos
Antes de tomar decisiones importantes, es esencial evaluar los riesgos y recompensas. Si bien no sabemos lo que suceda en el corto o mediano plazo, esta crisis habla de al menos dos bandos de poder sin importarles las consecuencias, y que por ahora lo único que han conseguido es poner en riesgo el futuro de la empresa más importante de IA en este momento.
Las negociaciones son un descubrimiento, no una guerra
Una de las lecciones más importantes de las negociaciones de alto riesgo que brinda Cris Voss en su libro “Rompe la Barrera del No”, es que el mejor negociador es el que calla, investiga, hace preguntas y averigua información de su contraparte y del contexto. Las negociaciones pueden jugarse ganar-ganar cuando se está dispuesto a darle al otro lo que quiere (una vez habiéndolo descubierto) y teniendo a cambio lo que uno desea. En una negociación donde quieres ganarlo todo, lo más probable es que termines por perderlo todo. Aún no sabemos las consecuencias para la junta directiva de OpenAI, pero me queda claro que Microsoft no va a quedarse de brazos cruzados ante una jugada tan violenta y con tan poca visión de futuro. ¿O es que acaso lo sabía y fue cómplice?
El equipo de trabajo es crucial
Los equipos de trabajo son la espina dorsal de las organizaciones y esto se notó ante la inmediata renuncia del presidente de la junta de OpenAI, Greg Brockman, y la amenaza de que hasta 90% de los empleados hagan lo mismo. ¿Cómo va seguir adelante OpenAI sin un equipo competente?, ¿cómo van a lograr atraer y convencer al escaso talento de profesionales de IA cuando están en plena crisis? Aquí es donde parece que Microsoft ha decidido contraatacar, ya que ha contratado a Sam Altman y a Greg Brockman para dirigir una nueva filial en Microsoft, garantizando lugar para “quien desee irse de OpenAI”.