Gracias a la IA es posible generar no sólo imágenes, canciones y temas musicales, sino presentaciones en Power Point, redactar documentos sobre cualquier temática compilando ideas de diversos autores (muchas veces sin el crédito autoral correspondiente) y hasta desarrollar deepfakes con la imagen de personalidades sociales, políticas o deportivas, vivas o muertas, con mensajes falsos para influir positiva o negativamente entre sus conocidos y seguidores.
Estamos viviendo una época en la que no sabemos qué es falso y qué verdadero: lo original puede desvirtuarse o definitivamente perderse y ser sustituido por la falsedad de textos, audios y hasta de imágenes personales. Todo ello implica problemas que trascienden lo ético y moral y se convierten en asuntos que han llevado a retos judiciales sobre todo en materia de propiedad intelectual, protección de los datos personales y por la divulgación de información clasificada.
Con el boom de la automatización han empezado a surgir empresas, como laboratorios o startups, creadoras de sistemas de generación de textos periodísticos. Una connotada agencia de noticias en Estados Unidos utiliza la plataforma Wordsmith para la redacción automática de noticias, en tanto en Europa un diario francés utilizó redacción automática de textos para cubrir las elecciones de 2015, al igual que un bot produjo casi 40,000 noticias sobre las elecciones de 2018 en Suiza. En estos casos la información fue acreditada genéricamente a la redacción del medio. ¿En dónde quedó el crédito de los reporteros que alimentaron de información?
Las preguntas son:
- ¿Una creación musical o literaria, en la que no interviene la creatividad del hombre puede ser objeto de protección legal? El hombre sólo ha alimentado de información a una máquina, pero no ha sido el creador de la obra, utiliza al robot como herramienta para crear algo.
- ¿El uso de una imagen y/o voz no autorizados puede quedar impune? Una imagen empleada sin autorización viola el derecho a la privacidad y puede generar serios problemas -inclusive legales- al afectado.
- ¿Puede un reportero acreditar la autoría de una nota informativa redactada con IA? El reportero investigó y obtuvo información, pero fue redactada por un robot, diferente a cuando el reportero dictaba telefónicamente su nota a un reportero de guardia y se publicaba dando crédito al reportero.
El tema es complejo y no hay mucha legislación o reglamentación al respecto. En Europa se ha abordado el tema legal desde hace tres años y a principios de este, en México, se propuso a revisión un proyecto de “Ley para la regulación ética de la Inteligencia Artificial”, sin grandes avances a la fecha.
