Con la madurez de la digitalización comercial también llega la evolución del consumidor y de sus necesidades, donde sobresale la experiencia como prioridad. Las compras en línea deben ser cómodas y seguras a través de las apps, una demanda constante que se observa en toda la industria.
En México, el comercio electrónico representa una transición de las compras tradicionales físicas a las aplicaciones tecnológicas, y también encarna una profunda evolución en la comprensión misma de los negocios y el comercio. Este concepto en el país es un testimonio de adaptabilidad e innovación para las empresas, gracias a la conectividad entre el usuario y la marca a través de una variedad de canales.
El e-commerce se ha convertido en el canal preferido para que los consumidores realicen compras. México ya superaba los 33 millones de dólares de valor del mercado en 2022, posicionándose como el segundo país más importante de América Latina para las ventas en línea, según datos de Statista .
Ante el crecimiento sostenido de esta vía de venta, las empresas se ven imparables en la búsqueda para brindar las mejores experiencias a sus clientes y así poder fidelizar su relación a largo plazo. En la actualidad, los consumidores están marcando el ritmo del mundo digital y las marcas deben responder con mejoras en los productos, en los tiempos de respuesta y en los factores que impulsen la retención del usuario.
Pero ante este panorama, ¿cómo las empresas pueden mejorar la experiencia del usuario? La respuesta siempre debe apuntar a la personalización en el comercio electrónico, esto implica adaptar la experiencia de compra de cada cliente satisfaciendo las necesidades y preferencias.
El reto es conocer al cliente para poder personalizar el e-commerce. Para lograrlo, la recopilación de datos del cliente es esencial, pues además de lograr el seguimiento en tiempo real de cada venta, permite a las marcas acercar contenido exclusivo como ofertas y recomendaciones. Toda la información que llegue a cada perfil irá forjando la relación de lealtad que impulsa las ventas.
Como consumidores, a todos nos gustaría tener este tipo de acercamiento por parte de las marcas, porque nos hacen sentir valorados y escuchados. y La lealtad del consumidor sigue existiendo pese a la abrumadora cantidad de competidores. En mi caso, siempre que quiero comprar algo en línea me dirijo con las marcas que ya saben lo que estoy buscando, y que me han ofrecido previamente alguna experiencia favorable. Estas empresas han aumentado mi valor como cliente.
Las firmas que recién entran al mundo del e-commerce deben entender las exigencias de los clientes para ofrecer una experiencia de compra favorecedora e impulsar la retención de los consumidores potenciales a través de herramientas que den de forma fácil y precisa los resultados de lo que está buscando.