Uno de los mayores retos de México y de la mayoría de los países latinoamericanos para mantener el índice de crecimiento del sector emprendedor consiste en impulsar la educación financiera y la inteligencia contable para evitar que las mipymes desaparezcan en el primer año de vida.
Impulsar la educación financiera y la inteligencia contable, reto de las mipymes
En los últimos años, las mipymes se han convertido en una vía efectiva para superar las barreras tradicionales del mercado laboral, al contribuir al desarrollo económico y social de la región.
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Actualmente, las micro, pequeñas y medianas empresas -mejor conocidas como mipymes- son el motor que impulsa la innovación, la generación de empleo y el crecimiento sostenible en América Latina, al representar aproximadamente 99% de las empresas, que generan más de 60% de los empleos en la región.
En los últimos años, las mipymes se han convertido en una vía efectiva para superar las barreras tradicionales del mercado laboral, al contribuir al desarrollo económico y social de la región.
Además de generar empleos, el espíritu emprendedor abre la puerta a nuevos negocios en industrias emergentes y en sectores con mayor número de emprendimientos, como el comercio minorista, los servicios profesionales, la tecnología y las comunicaciones. En estos ámbitos, las mipymes se han convertido en piezas clave dentro del corredor de proveeduría de las grandes empresas, que compiten a nivel global.
En México, los servicios profesionales (28.92%), el comercio al detalle (23.43%), la tecnología y las comunicaciones (10.88%) son los sectores con mayor participación emprendedora. De allí la importancia de generar esquemas contables sanos, apoyados por herramientas tecnológicas accesibles y de fácil uso, para que los emprendedores consoliden sus ideas, a través de estrategias de negocio enfocadas a su crecimiento.
Como ocurre en las grandes ciudades latinoamericanas, la Ciudad de México lidera la actividad emprendedora a nivel nacional, con una participación de 35%; seguida por Puebla, Monterrey -polo de atracción de emprendedores en los sectores de manufactura, tecnología y comercio-, Guadalajara -consolidada como HUB tecnológico- y Querétaro con un fuerte potencial de crecimiento, impulsado por su calidad de vida y seguridad.
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Los jóvenes, entre 25 y 34 años, son el sector más activo en la creación de nuevas empresas en Latinoamérica, con una participación de 23.4%. México no es la excepción a esta tendencia, ya que la población entre 18 y 34 años de edad, representa 42.4% del total de emprendedores mexicanos; seguidos por personas de 35 a 54 años (36.3%) y los emprendedores mayores a 55 años (21.3%), tendencia que muestra que el emprendimiento es una opción viable a desarrollar en diferentes etapas de la vida laboral, como lo revela el estudio Latinoamérica Emprende: Análisis de las Mipymes en la Región, realizado en siete países de América Latina, con información proporcionada por más de 700,000 empresas registradas en la plataforma de Alegra.com en Argentina, Colombia, Costa Rica, México, Panamá, Perú y República Dominicana en 2024.
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Nota del editor: Juliana Caballero es Directora de Estrategia de Alegra para México y Latinoamérica. Las opiniones publicadas en esta columna corresponden exclusivamente a la autora.
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