A primera vista, su influencia parece una fuerza positiva invencible, cimentada en videos donde siembra 20 millones de árboles o construye 100 pozos de agua para comunidades en África. Pero detrás del brillo del éxito y los números récord, las recientes denuncias éticas han comenzado a poner en duda esa imagen heroica, revelando que incluso los líderes más admirados no están exentos de desafíos éticos.
El inicio de las denuncias
Todo comenzó en julio de 2024, cuando a una de sus colaboradoras y mejores amigas, Ava Kris Tyson, se le acusó de comportamiento inadecuado hacia menores de edad. Al principio ella negó las acusaciones, pero con la aparición de capturas de chat que evidenciaban su comportamiento, decidió separarse de la compañía.
Esto marcó el inicio de una serie de denuncias. Algunas relacionadas con comentarios racialmente insensibles que Jimmy había hecho en el pasado y por los que emitió una disculpa pública; otras vinieron de participantes y empleados de su programa de concursos Beast Games, quienes reportaron condiciones inseguras, y de consumidores de su producto de comida Lunchly, que señalaron problemas de salubridad.
Para Jimmy Donaldson, este escándalo no es solo un golpe a su reputación personal, sino también un reflejo de los retos inherentes a liderar una estructura corporativa que creció más rápido que sus mecanismos de gobernanza. En muchos sentidos, esto evidencia un problema recurrente en las empresas emergentes: el choque entre un crecimiento explosivo y la falta de preparación para gestionar riesgos éticos.
El equilibrio entre ser un creador y un líder en formación
MrBeast enfrenta un dilema que no es exclusivo de las empresas tecnológicas ni de las redes sociales: ¿cómo balancear la creatividad y la velocidad de ejecución con la responsabilidad de liderar éticamente? Su caso nos recuerda que las grandes innovaciones suelen venir acompañadas de grandes vulnerabilidades, especialmente cuando los sistemas de control no evolucionan al mismo ritmo que el modelo de negocio.
En su caso, el modelo de negocio centrado en la exposición extrema y la hiperproductividad —donde el "siguiente gran video" siempre está a la vuelta de la esquina— lo hace especialmente vulnerable a estos riesgos.
Los pasos correctos que ha tomado
A pesar de los retos, MrBeast ha implementado varias medidas que pueden ayudar a mitigar el impacto de estas denuncias. Estas acciones reflejan un compromiso inicial por aprender de los errores y tomar medidas correctivas:
1. Disculpa pública: Como figura pública, reconocer los errores y comprometerse a corregirlos es esencial. Jimmy no solo asumió la responsabilidad, sino que utilizó su plataforma para subrayar los cambios que implementará, un paso que refuerza su conexión con su audiencia.
2. Auditoría ética independiente: En un movimiento que demuestra seriedad, ha contratado a una firma externa de reputación reconocida para auditar las prácticas de su compañía. Esta decisión refleja su disposición a enfrentar los problemas de raíz.
3. Actuar sobre los hallazgos: Además de solicitar la auditoría, es crucial que comparta los resultados y los planes de acción derivados. La transparencia en estos procesos no solo restaura la confianza, sino que también establece un precedente en su organización y sus proyectos.
Herramientas y acciones para fortalecer la ética corporativa
El caso de MrBeast nos recuerda que, incluso en los ecosistemas más dinámicos y exitosos, el fortalecimiento ético debe ser una prioridad. Para prevenir y gestionar los riesgos éticos, se pueden utilizar las siguientes herramientas que son ampliamente utilizadas en el mundo corporativo:
- Código de ética y conducta: Es esencial para establecer expectativas claras desde el principio, algo que podría haber prevenido varios de los problemas que enfrentó MrBeast al dejar en claro las conductas esperadas en sus proyectos y equipos de trabajo.
- Canal de denuncias confidencial: Un sistema que permita detectar problemas de manera temprana, brindando a los colaboradores un espacio seguro para alzar la voz.
- Capacitación en ética y liderazgo: Las capacitaciones en todos los niveles son clave para construir una cultura ética que esté a la altura del crecimiento de la organización.