La decisión de Twitter escaló el pulso entre Trump y las compañías tecnológicas. Se produjo horas después de que el mandatario firmó un decreto que amenaza a las firmas de redes sociales de Silicon Valley con nuevas regulaciones a la libertad de expresión, después de que Twitter añadió una etiqueta de verificación a sus tuits de esta semana sobre supuestos fraudes en el voto por correo.
También llega en un momento de disturbios de gran carga racial en varias ciudades de Estados Unidos tras la muerte de George Floyd, un hombre negro que fue grabado en un video con problemas para respirar mientras un policía blanco presionaba una rodilla contra su cuello.
"...Estos MATONES están deshonrando la memoria de George Floyd, y no permitiré que eso suceda. Acabo de hablar con el Gobernador Tim Walz y le he dicho que el Ejército está a su total disposición. Cualquier dificultad y asumiremos el control pero, cuando empiezan los saqueos, empiezan los tiros. ¡Gracias!", reza el tuit de Trump marcado por Twitter.
La cuenta oficial de la Casa Blanca en Twitter también envió más tarde el mismo mensaje. Twitter declinó comentar si haría lo mismo con el nuevo tuit.
El mensaje de Trump ya solo puede leerse haciendo clic en aviso que dice: "Este tuit infringió las reglas de Twitter sobre glorificación de la violencia. Sin embargo, Twitter ha concluido que puede ser de interés público que el tuit siga estando accesible".