Uber y Lyft se comprometieron a pagar los honorarios legales de cualquiera de sus conductores en Texas que sea demandado bajo la polémica ley antiaborto, aprobada la semana pasada, la cual permite a los ciudadanos demandar a quien ayude a una mujer en la interrupción de su embarazo, incluso si esto signifca proporcionarle transporte a una clínica.
“Este es un ataque al acceso de las mujeres a la atención médica y a su derecho a elegir”, comentó en Twitter el cofundador y director ejecutivo de Lyft, Logan Green, quien también anunció que la empresa creará un “fondo de defensa legal para los conductores”, cuyo propósito será cubrir el 100% de los honorarios legales si los socios son demandados bajo la nueva legislación.
En un comunicado, el ejecutivo también mencionó que los conductores no monitorean a dónde van los pasajeros y, sin embargo, alguien podría demandarlos si es que se dirigen a una clínica. Asimismo, dijo que para los clientes también es una medida “inaceptable”, pues existe la posibilidad de que no le presten el servicio durante una emergencia médica.