Tras año y medio de trabajo remoto, las empresas lograron adaptar sus sistemas para mantener las operaciones; sin embargo, muchas de ellas aún deben enfrentarse a las decisiones de sus propios empleados, quienes suelen obtener herramientas tecnológicas por su cuenta, fomentando el fenómeno conocido como Shadow IT.
De acuerdo con la empresa de ciberseguridad, ESET, este problema surge cuando un empleado usa cualquier tipo de software o hardware que no cuenta con la aprobación ni el control del área de tecnología de la información de la compañía.
Aunque en apariencia puede no representar un problema, Alain Karioty, vicepresidente para Latam de Netskope, una plataforma de seguridad en la nube, explica que sí es un asunto relevante, pues pueden ser la puerta de entrada de otro tipo de ataques de mayor relevancia para la organización, como el phishing o el ransomware.