La Inteligencia Artificial está cambiando la forma en que las empresas operan, pues ha logrado automatizar flujos de trabajo en áreas desde los recursos humanos hasta la financiera, pero aún se necesita mejorar esta tecnología para que se utilice de manera responsable y genere confianza en los usuarios fuera de los entornos empresarial o tecnológico.
En los últimos años, menciona Andrés Mendoza, regional technical manager de ManageEngine, ha habido una gran cantidad de avances respecto a IA, pero la gente sigue desconfiando de la tecnología, pues si bien se usa para entregar préstamos bancarios, por ejemplo, existen sesgos en su programación que no permiten un uso equitativo de los recursos.
Por ello, los motores de IA deben estar planteados bajo una perspectiva de equidad. Para alcanzar este objetivo, menciona Mendoza, es necesario que los grupos de desarrollo y diseño sepan para qué se usará la información y el flujo que van a seguir los datos, pues su procesamiento será vital para su éxito.