Google pierde un caso de infracción de patentes contra Sonos

“No esperamos ningún impacto en nuestra capacidad de importar o vender nuestros productos”, dijo el portavoz de Google, José Castañeda, en referencia a los cambios que le permitió realizar la Comisión y al plazo que tendrán para hacerlo.

El organismo no detalló cuáles serán los dispositivos prohibidos, pero el caso involucró una importante gama de productos, como los sistemas de sonido Nest Hub, WiFi Nest, los teléfonos Pixel y las computadoras portátiles Pixelbook.

Cabe mencionar que Google ya ha comenzado a implementar cambios en torno a estas patentes a través de diversas actualizaciones de software. Incluso explicó en una entrada de blog que algunos usuarios deberán descargar una aplicación especial para configurar algunos dispositivos en su red y ya no podrá ajustar el volumen de un grupo de altavoces al mismo tiempo.

Este caso data de hace un par de años, cuando Sonos alegó que Google se enteró de su tecnología después de haber trabajado en una asociación para integrar Google Play Music a los productos de Sonos.

Si bien existe la posibilidad de que Google siga importando sus dispositivos, desde Sonos afirman que estos hardware serán peores, pues deberán “degradar o eliminar las características del producto de una manera que eluda la prohibición de importación impuesta por el organismo”.

“Google puede sacrificar la experiencia del consumidor en un intento de eludir esta prohibición de importación, sus productos seguirán infringiendo muchas docenas de patentes de Sonos, sus irregularidades persistirán y los daños adeudados a Sonos seguirán acumulándose”, dijo la empresa con sede en Santa Bárbara, California.

Ante esto, la compañía también refirió que los de Mountain View podrían, “como ya lo han hecho otras empresas, pagar una regalía justa por las tecnologías de las que se ha apropiado indebidamente”.

Tras darse a conocer la decisión de la Comisión, las acciones de Sonos subieron más del 5% en operaciones extendidas. Para Google, en cambio, este fallo representa un golpe para la imagen de su negocio de hardware, en el cual ha estado compitiendo desde hace algunos años con otras compañías como Apple y Amazon.