Intel es la última de las empresas tecnológicas que han decidido suspender todas sus operaciones en Rusia, un mes después de haber detenido los envíos a clientes en dicho país y Bielorrusia, a causa de la invasión a Ucrania.
“Intel continúa uniéndose a la comunidad global para condenar la guerra de Rusia contra Ucrania y pedir un rápido retorno a la paz”, dijo la compañía a través de un comunicado, en donde también resaltó que apoyará a sus 1,200 empleados en Rusia e implementará medidas de “continuidad comercial” para minimizar la interrupción de sus operaciones globales.
Cabe mencionar que el hecho de mencionar una ayuda para sus trabajadores en este país es un asunto destacado, ya que según estimaciones de la Asociación Rusa de Comunicaciones Electrónicas, unos 70,000 especialistas en TI huyeron del país entre febrero y marzo. El mismo organismo también prevé que tan sólo en abril suceda lo mismo con otros 100,000 expertos en la materia.