Assamese, utilizado por cerca de 25 millones de personas en el noreste de la India.
Aimara, utilizado por cerca de dos millones de personas en Bolivia, Chile y Perú.
Bambara, utilizado por unos 14 millones de personas en Malí.
Bhojpuri, utilizado por unos 50 millones de personas en el norte de la India, Nepal y Fiji.
Dhivehi, utilizado por cerca de 300,000 personas en las Maldivas.
Dogri, utilizado por cerca de tres millones de personas en el norte de la India.
Ewe, utilizado por alrededor de siete millones de personas en Ghana y Togo.
Guaraní, utilizado por cerca de siete millones de personas en Paraguay, Bolivia, Argentina y Brasil.
Ilocano, utilizado por unos 10 millones de personas en el norte de Filipinas.
Konkani, utilizado por cerca de dos millones de personas en la India central.
Krio, utilizado por alrededor de cuatro millones de personas en Sierra Leona.
Kurdo (sorani), utilizado por cerca de ocho millones de personas, principalmente en Irak.
Lingala, utilizado por unos 45 millones de personas en la República Democrática del Congo, la República del Congo, la República Centroafricana, Angola y la República de Sudán del Sur.
Luganda, utilizado por alrededor de 20 millones de personas en Uganda y Ruanda.
Maithili, utilizado por cerca de 34 millones de personas en el norte de la India.
Meiteilon (manipuri), utilizado por alrededor de dos millones de personas en el noreste de la India.
Mizo, utilizado por cerca de 830,000 personas en el noreste de la India.
Oromo, utilizado por unos 37 millones de personas en Etiopía y Kenia.
Quechua, utilizado por alrededor de 10 millones de personas en Perú, Bolivia, Ecuador y países circundantes.
Sánscrito, utilizado por unas 20,000 personas en la India.
Sepedi, utilizado por cerca de 14 millones de personas en Sudáfrica.
Tigrinya, utilizado por alrededor de ocho millones de personas en Eritrea y Etiopía.
Tsonga, utilizado por unos siete millones de personas en Suazilandia, Mozambique, Sudáfrica y Zimbabwe.
Twi, utilizado por alrededor de 11 millones de personas en Ghana.