Hernández resalta que este panorama representa una oportunidad para los negocios. No obstante, también destaca que el enfoque no debe ser tradicional, sino abordar la plataforma desde la creatividad.
“Las pequeñas empresas son más experimentales y estas narrativas le gustan más a la gente”, afirma Hernández. “Son un poco más libres cuando se trata de cómo presentarán su marca”.
Un ejemplo de esta naturalidad, aporta la ejecutiva, se da en los detrás de escena de un producto, pues les da realismo autenticidad, dos características que buscan los usuarios e, incluso, son ejemplos para empresas más grandes.
“Genera más confianza, porque transmiten la idea de que no pagaron para crear un ambiente. Realmente me están mostrando el detrás de escena y están mucho menos preocupados por verse perfectos, además de no tener miedo a experimentar”, menciona.
La estrategia para aprovechar TikTok
Hernández recomienda que al entrar a TikTok, los negocios la deben ver como una plataforma de entretenimiento y no como un sitio más sólo para promocionar sus productos, pues esa estrategia va a ser incompleta.
“Las marcas y agencias deben pensar de diferente sobre cómo ejecutan sus procesos de planificación y también cómo piensan conectarse con los consumidores o audiencias, porque no somos una red social, sino una plataforma de entretenimiento”, sostiene.
Entre los consejos que aporta en este sentido se encuentran no poner tanta atención en cumplir con ciertas condiciones, como la duración del video y en su lugar debe destacar la creatividad, aun cuando eso represente correr más riesgos que inspiran y gustan.
“Es como si tuviera que desaprender lo que me han enseñado sobre publicidad, porque esto es nuevo”, menciona e incluso este tema también impacta en la relación de los negocios con los potenciales influencers. “Debemos pensar como especialistas en marketing, pero debemos actuar como creadores”.
Dicha premisa implica que los creadores quieren asociarse con las marcas de una manera auténtica para sus audiencias hasta el punto de que ellos trabajen como consultores, es decir, dejar su marca en manos de los creadores y dejar que conecten con sus audiencias a su manera.