Al adquirir un nuevo teléfono los consumidores buscan varias opciones, que van desde las tiendas oficiales de las marcas hasta el mercado gris, donde los dispositivos electrónicos se venden fuera de las vías convencionales.
El mercado gris de celulares no es ilegal, pero afecta a la industria de smartphones en México debido a que se trata de productos comprados en otros países sin que pasen por una evaluación y permiso de las empresas fabricantes.
Por ejemplo, un Samsung Galaxy A14 de 128 Gb cuesta 2,649 pesos a través de un distribuidor en Mercado Libre, mientras que el mismo teléfono en la página oficial tiene un costo de 3,999 pesos. Sin embargo, no siempre es el caso que se encuentre más barato. Por ejemplo, un iPhone 13 de 256 GB, en el mercado gris se puede encontrar por 16,999 pesos mientras que en la tienda oficial de Apple su costo es de 16,499 pesos.
Por ello, antes de adquirir un dispositivo hay que preguntarse: ¿cuál es la diferencia de precio entre estos dos canales de compra y los riesgos asociados con cada uno?