La industria de los videojuegos es de contrastes. Mientras las historias que cuentan los equipos de desarrollo maduran e integran temáticas y grupos sociales diversos, hay sectores de jugadores que no quieren ver ese contenido y prefieren insultar o acosar, trayendo de vuelta un episodio oscuro en la historia del gaming, conocido como Gamergate.
¿Qué es Gamergate y por qué regresó?
El origen del Gamergate fue en 2014, cuando un grupo de jugadores iniciaron una campaña de acoso hacia mujeres que denunciaron la misoginia dentro de la industria. Durante esta época se utilizó el hashtag #GamerGate para identificar a los miembros de estos grupos de odio y de la extrema derecha.
Ahora, luego de ocho años en los que el gaming ha evolucionado, gracias a temáticas más maduras y con un mayor índice de representación cultural, de género y racial el objetivo del Gamergate 2.0 es la empresa de consultoría y desarrollo narrativo Sweet Baby, la cual ha sido acusada de incorporar “inclusión forzada” a los videojuegos.