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Las lecciones que México puede aprender de China en materia tecnológica

El gigante asiático se convirtió en uno de los ejemplos a seguir en el área digital, un sector fundamental para el desarrollo económico del país.
mié 17 julio 2024 05:28 AM
México tiene mucho que aprender de China
Shenzhen es uno de los ejemplos más relevantes de los que México puede aprender en el entorno tecnológico.

No es un secreto que China es de los centros tecnológicos más importantes en todo el mundo. Tampoco que en su proceso de expansión haya tenido impacto en otras naciones como México, uno de los países que requiere más aprendizaje en materia digital para su desarrollo, especialmente ante un escenario económico donde el nearshoring será fundamental.

“China es un ejemplo a seguir en cuestión tecnológica”, comenta Federico González Waite, director ejecutivo del Centro de Investigación e Innovación en Tecnologías de la Información y Comunicación (Infotec), debido a que se trata de la segunda nación con la mayor tasa poblacional del mundo y aun así lograron implementar una infraestructura digital para sus más de 1,400 millones de habitantes.

Uno de los casos más significativos, de acuerdo con González, es Shenzhen, una ciudad que hace 40 años se dedicaba a la actividad pesquera y a la siembra de arroz, pero que ahora es el centro tecnológico más importante de China, con más de 6,000 fabricantes de dispositivos de impacto mundial, como Honor, Huawei o BYD, entre otros.

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Shenzhen, una ciudad que creció de la mano de la tecnología

En 1979, esta ciudad fue declarada la primera “zona económica especial” de China, lo cual implicó una política de apertura a la inversión de capital nacional y extranjero que produjo un entorno pujante para las fábricas tecnológicas , mismas que se llenaron de trabajadores locales e incluso migrantes.

Para mediados de la década de los 90 esta región tenía 3 millones de habitantes. Ahora hay más de 12.5 millones de personas que tienen presente en la mente el lema de la ciudad: “El tiempo es dinero, la eficiencia es vida”.

González afirma que este tipo de enfoque a largo plazo es una buena lección en México para construir centros de innovación en el país, e incentivar el desarrollo de otras regiones que tradicionalmente no estaban implicadas con el avance tecnológico.

Querétaro es una de las entidades que más inversión extranjera han obtenido para la instalación de centros de datos por parte de empresas como Google, AWS, y Microsoft. Asimismo, el gobierno local construyó un Centro de Innovación y Tecnología Creativa, en donde se enseñan tecnologías relacionadas a realidades mixtas, videojuegos y blockchain.

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González resalta la importancia de que en estas iniciativas no estén implicados únicamente gobiernos locales, sino que se trate de una política pública federal para verdaderamente generar una visión digital a futuro.

La visión del talento en China se expande a México

En China, las exigencias sobre el talento digital son constantes e incluso provienen por parte del presidente Xi Jinping, quien es consciente de que el tema es prioritario. La semana pasada, por ejemplo, admitió que su país sigue con deficiencias en el camino a ser una potencia mundial.

De acuerdo con el político, existe una escasez de mano de obra y talento especializado, algo que se suma a las quejas de los investigadores, quienes han considerado que hay cargas no académicas, como la burocracia en diferentes sectores.

A pesar de estas problemáticas al interior de la industria china, las empresas han llevado el enfoque de desarrollo tecnológico a otras latitudes y México es uno de los países más atractivos.

Este año, Infotec se alió con Huawei para incentivar el Programa de Desarrollo de Talento IA 1000, una iniciativa con la que se le dio formación y certificación en Inteligencia Artificial (IA) a más de mil personas mexicanas y extranjeras residentes en México, con la finalidad de promover el desarrollo, la soberanía y la independencia tecnológica del país.

Durante esta edición se recibieron proyectos de distintos perfiles, desde especialistas en ingeniería, hasta periodistas o químicos provenientes de lugares como Ciudad de México hasta la sierra de Guerrero.

“Soy un fiel creyente de que para ser tecnólogo no tienes que ser ingeniero”, comenta González. “Se trata de moldear la tecnología a las disciplinas y no al revés, porque la manera en que la puede utilizar un médico es totalmente diferente a la de un abogado”.

Como parte de este proyecto, los 107 mejores promedios tuvieron la oportunidad de viajar a China para recibir instrucción avanzada por parte de los expertos de la compañía, una experiencia enriquecedora, menciona el funcionario, debido a que cuando vuelven se asumen como “agentes de cambio” para sus localidades, desde el enfoque de iniciar un emprendimiento o convertirse en impulsores de la transformación digital del país.

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