El consumo de tabaco, alcohol, bebidas azucaradas y comida chatarra han aumentado su carga global de enfermedad a nivel mundial. Tan solo en México, el consumo de estos productos fue asociado al 18% de las muertes en 2017, de acuerdo con la ONG Alianza por la Salud Alimentaria.
El consumo de bebidas azucaradas se asoció con 16,348 decesos (2.3% del total de muertes con factor de riesgo identificado); fumar se asoció con 59,055 (8.4% del total) y al uso de alcohol se le atribuyeron 51,575 muertes (7.2%).
Para disminuir estas cifras, la Alianza por la Salud Alimentaria sugiere un incremento en los impuestos a este tipo de productos, pues su consumo tiene un impacto negativo en el sistema de salud, el cual, cuenta con cada vez menos presupuesto.
Durante los últimos años de la pasada administración, el presupuesto en salud disminuyó un 4% en términos reales, con una reducción en el número de usuarios de instituciones y programas de salud en 5.6 millones de personas, según la ONG.
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Además, al 2017, el gasto público en salud representó solo el 2.8% como porcentaje del Producto Interno Bruto (PIB), el más bajo en los últimos 9 años.
En países como Estados Unidos, este gasto representa el 14.3% de su PIB; en Cuba, el 10.9%; Alemania, 9.4%; Francia, 9.3% y Suecia, 9.2%.
Según la ONG, el alcohol, el tabaco, las bebidas azucaradas y la comida chatarra tienen factores en común:
1. Generan altos costos para el sector salud y para la economía de las familias
2. Son productos de los que la población tiene información insuficiente sobre sus daños en salud
3. Son productos adictivo y se asocian con problemas de autocontrol o con consumo compulsivo.
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¿Un incremento en impuestos es la solución?
Para elevar el presupuesto del sistema de salud, la Alianza por la Salud Alimentaria considera pertinente un aumento en los impuestos a este tipo de productos, pues, aunque ya cuentan con un impuesto agregado, es "bajo" en comparación con otros países.
La ONG considera que un incremento de 2 pesos por litro en el caso de las bebidas azucaradas, como jugos y refrescos sería ideal para inhibir su consumo y aumentar el presupuesto de las instituciones de salud
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En cuanto a la comida 'chatarra', como frituras, galletas y demás alimentos altos en azúcar y sodio, la ONG sugiere un incremento de entre el 8% al 12% de su valor, mientras que a los cigarros, un aumento de entre 7 a 10 pesos por cajetilla es su propuesta.
Este año, el presupuesto de salud es de 124,000 millones de pesos, pero si se incrementan los impuestos a estos productos se tendrían más de 50,000 millones de pesos adicionales, un 40% más del presupuestó asignado.
Con información de EFE.