OPINIÓN: El muro de Trump sería un regalo para los cárteles de la droga
Nota del editor: Alice Driver es periodista independiente y traductora; su trabajo se centra en la migración, los derechos humanos y la igualdad de género. Actualmente vive en la Ciudad de México. Driver es autora del libro More or Less Dead: Feminicide, Haunting, and the Ethics of Representation in Mexico. Las opiniones en esta columna pertenecen exclusivamente a la autora.
(CNN) — Entre los trucos del negocio multimillonario de la droga están el uso de drones , submarinos, aviones ultraligeros e incluso tiburones congelados para pasar el producto por la frontera entre México y Estados Unidos. Tan solo piensen que en 2016, los agentes de Operaciones Aéreas y Marítimas de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos intentaron decomisar en el océano Pacífico un submarino con casi 194 millones de dólares en cocaína.
Pese a todo, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, afirma que el muro fronterizo que propone, un retorno a una época pasada, "impedirá que gran parte de las drogas entren a este país y envenenen a nuestros jóvenes".
OPINIÓN: ¿Deben los demócratas negociar con Trump el muro fronterizo?
Como dijo en julio pasado, le preocupa que los contrabandistas arrojen "grandes bolsas de drogas" encima de muro y golpeen a los ciudadanos estadounidenses en la cabeza… preocupación que lo llevó a pedir un muro fronterizo transparente.
Si consigue en el Congreso los recursos para construir el muro, Trump se enfrentará a un problema aún mayor : la realidad geográfica de la frontera. Cualquier muro tiene que sortear tierras inundables, tratados internacionales y los derechos de los terratenientes que se niegan a vender sus propiedades. Sencillamente, Trump no entiende la dinámica de la frontera entre Estados Unidos y México.
Pero lo más importante es que el muro será un regalo para los cárteles de la droga. En entrevista con un colaborador del New York Times, algunos narcotraficantes y traficantes de personas le agradecieron por adelantado a Trump por su muro fronterizo. Los contrabandistas lo consideran una distracción encantadora porque tiene poca aplicación práctica en un mundo en el que usan la tecnología más avanzada para transportar drogas y personas hacia Estados Unidos. Creen que en todo caso, el muro aumentará sus ganancias y fortalecerá las redes delictivas.
Lee. Trump vuelve a la carga: México pagará por el muro
Y es probable que no estén tan equivocados. Según un informe que publicó la Administración para el Control de las Drogas de Estados Unidos en 2015, el 95% de las drogas entra a Estados Unidos en barcos de carga y otras embarcaciones.
Además de los drones y los submarinos, los narcotraficantes y los traficantes de personas recurren al sector del autotransporte para meter drogas y personas a través de los 52 cruces legales situados a lo largo de la frontera con Estados Unidos. En julio descubrieron a ocho migrantes muertos dentro de un tráiler estacionado en un Walmart en San Antonio, Texas; dos más murieron en el hospital y había varios lesionados.
Las cantidades increíbles de dinero que genera el contrabando suelen usarse para sobornar a los agentes fronterizos y a las personas que inspeccionan los vehículos que entran a Estados Unidos. Un muro no impediría nada de esto.
nullLa verdad es que los ciudadanos estadounidenses demandan drogas de América Latina constantemente. Según la Encuesta Nacional sobre Consumo de Drogas y Salud 2015, 27.1 millones de personas de más de 12 años han consumido drogas en los pasados 30 días, el equivalente a uno de cada 10 estadounidenses de ese segmento demográfico.
Los estadounidenses también dependen del trabajo de los migrantes indocumentados que suelen cruzar la frontera entre Estados Unidos y México. En un informe que publicó Pew en 2017 se expone que en Estados Unidos viven más de 11 millones de inmigrantes indocumentados , que componen aproximadamente el 5% de la fuerza laboral.
Pero ni siquiera los migrantes indocumentados le temen al muro de Trump. Al entrevistar a migrantes mexicanos, guatemaltecos, hondureños y salvadoreños a lo largo del año pasado para un proyecto de Longreads , descubrí que para ellos, el muro es más un símbolo de racismo que una barrera funcional.
Día 4 del 2018: Trump retoma la construcción del muro
Muchos se ríen del muro y hacen referencia a la inigualable arquitectura de túneles de los contrabandistas mexicanos. Esta arquitectura se extiende incluso a túneles submarinos operados por buzos contrabandistas. Irónicamente, estos mismos migrantes huyen de una violencia sin precedentes que es consecuencia, en gran medida, de la demanda de drogas en Estados Unidos.
De acuerdo con Trump , "las drogas están entrando en cantidades nunca antes vistas. Podremos detenerlas una vez que el muro se haya erigido". Como empresario, Trump debería entender que las leyes de la oferta y la demanda se aplican tanto a la venta de la línea de ropa de Ivanka como al tráfico de drogas. En tanto exista la demanda en Estados Unidos, los proveedores, ya sea en México o en Afganistán, encontrarán formas creativas de satisfacerla.
Hasta que Trump aborde la epidemia de consumo de drogas ilícitas como una cuestión de salud pública y no como un delito , la demanda de drogas procedentes de Centroamérica seguirá creciendo.
Lee: Trump pide al Congreso 18,000 mdd para el muro con México
En la realidad de Trump, los narcos meten droga en costales y solo un muro transparente de varios millones de dólares los detendrá. La verdad es que el muro es solo un símbolo. Es un monumento físico a la idea de regresar a un pasado blanco más homogéneo, un pasado que ignora la contribución de los migrantes indocumentados y la realidad de que han criado a nuestros hijos y alimentado a nuestras familias.
Los narcos, empresarios consumados, le agradecerán a Trump por esta distracción en forma de muro fronterizo mientras operan drones y construyen submarinos que hacen realidad nuestros sueños de drogas.
Consulta más información sobre este y otros temas en el canal Opinión