Con el aislamiento en casa, cada miembro del equipo debe encontrar una agenda que le permita estar concentrado y equilibrar su vida personal con el trabajo. La tarea del líder es mantener integrado al grupo, respetando las dinámicas individuales, así como estar presentes en el desempeño de cada uno.
"Los líderes deben estar preparados para lidiar con la crisis de manera eficiente y lograr el menor daño posible por el impacto que se pueda tener en la operación de la organización y de las personas", dice Alberto del Castillo, director de Servicios y Calidad de Grupo Adecco México.
La fórmula de motivación debe contener los siguientes elementos, según los especialistas:
1. Entender al colaborador
El líder de equipo debe entender cuáles son las condiciones con las que trabajan desde casa cada uno de los integrantes, dice María Inés Corva, consultora en Desarrollo Humano. "Se debe conocer y entender las circunstancias de quienes lo integran. No es lo mismo vivir solo, que tener hijos o alguien que está en pareja, pues las exigencias son diferentes".
2. Impulsar los talentos
Este punto aplica tanto a nivel remoto como presencial. Esto significa que, en sus labores cotidianas, los colaboradores puedan utilizar las habilidades que los hacen únicos. "Si tienes un cargo donde no las puedas poner en práctica, probablemente no te guste el trabajo", comenta Adriana Castro, fundadora de la firma de asesoría Call to Action: Empresas Felices. Aquí la tarea del líder es permitir que el talento se ponga en práctica o reubicar a la persona en otra área donde se sienta más cómoda.