En el caso de las nuevas contrataciones, Norma Godínez, directora de recursos humanos de la firma, cuenta que recurrieron a socios logísticos para enviar un kit personalizado de contratación a cada nuevo integrante. El paquete incluye el contrato para firmar, la información del líder de área y artículos promocionales de la institución contratante. Un vaso, libreta, pluma y pin son algunos de ellos.
Después, los nuevos compañeros inician un entrenamiento de 90 días. A través de videoconferencias, se les da un panorama de la compañía, los procesos, valores y políticas internas. También son presentados al resto de los compañeros y el líder les da un seguimiento para que sepan cómo realizar sus funciones y medir resultados.
En cuanto a los miembros que ya son parte de la compañía, Godínez agrega que ajustaron sus políticas internas para que todos los comportamientos de los empleados estuvieran alineados a los principios de la organización.
“La mayoría de los líderes que hay en la empresa son generación X, pero hay algunos millennials. Mientras unos textean, otros prefieren hablar cara a cara, sobre todo temas delicados. Y aunque existen los emojis para añadir emoción en un texto, es muy fácil caer en malinterpretaciones. Así que homologamos comportamientos por escrito para hacer la relación más sencilla”, detalla.
Esto los ha ayudado a cuidar su imagen corporativa frente a los empleados. Sin embargo, los líderes todavía tienen retos importantes. Escobar advierte que 2021 abre la puerta para que los líderes adquieran la habilidad de la escucha, que sean más empáticos, que establezcan metas alcanzables y retroalimenten a su equipo.
“Al ser quienes guían y motivan a los colaboradores, deben ejercer un rol modelo de liderazgo y trabajar con recursos humanos y marketing para construir una marca empleadora, basada en una cultura organizacional más flexible y humana”, agrega.