La pandemia de coronavirus puso en jaque a las empresas. Desde marzo del 2020, las organizaciones han tenido que modificar y automatizar sus procesos para seguir operando a distancia. Y en este proceso, el cuidado de la marca empleadora también exige evolucionar.
Las organizaciones –sin importar su tamaño- no deben perder de vista que su marca empleadora tiene que seguir vigente, y más en tiempos de incertidumbre. De eso depende cómo es percibida por la sociedad en general y por sus propios colaboradores, asegura René Escobar, gerente comercial de Top Employers Institute, firma global que certifica las capacidades de recursos humanos.
Para adaptarse a la nueva realidad laboral, y no perder la cercanía con los empleados, la firma de capital humano Kelly centró sus esfuerzos en reforzar su marca empleadora. Al ser una empresa que ofrece el servicio de reclutamiento, no sólo se trataba de ella sino de las organizaciones que contratan el servicio para hallar a su talento.