El costo de la deuda quita el sueño a Morena en el presupuesto 2019
CIUDAD DE MÉXICO (Expansión) - Para el “hombre de los dineros”, como le llaman sus colegas diputados al morenista Alfonso Ramírez Cuéllar, la mayor preocupación en el diseño del presupuesto 2019 es el aumento en los intereses de la deuda pública del país.
“La mayor preocupación para mí, cuando menos, es la tasa de interés (...) por el servicio de la deuda tan enorme (...) Va a sufrir un incremento, desafortunadamente así va a ser”, confesó.
El legislador preside la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública en la Cámara de Diputados, y por su escritorio pasará el dictamen del Presupuesto de Egresos de la Federación para 2019.
A más tardar el 15 de diciembre, el presidente Andrés Manuel López Obrador enviará un presupuesto austero, responsable y sin más deuda, según ha dicho. La Comisión, con el 52% de los integrantes miembros de Morena, lo examinará y palomeará para enviarlo al pleno, incluso puede hacer cambios.
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Hasta la primera mitad del año, dijo, esperaban que el servicio de la deuda para el próximo año fuera de 730,000 millones de pesos (mdp), sin embargo actualmente calculan que llegará a 800,000 mdp.
“Hay una evolución (en el aumento de tasas), vamos a ser muy objetivos, para mí esa es una de las preocupaciones mayores”, insiste.
El Banco de México fijó la tasa de referencia en 8% en su última reunión de política monetaria, en noviembre, y dejó ver que podría incrementarla de nuevo el 19 de diciembre.
El costo de la deuda, sumado a otros gastos obligatorios como pensiones, participaciones y aportaciones a entidades federativas, principalmente, consumirán unos 4 billones de pesos (bdp), lo cual limitará el margen de maniobra federal.
Eso significa que quedarán libres 1.7 billones para cumplir con el resto del gasto pues, según Ramírez Cuéllar, el presupuesto de egresos rondará los 5.7 bdp,
El panorama se complica más ante el cambio en las proyecciones de las principales variables macroeconómicas, que son la base para calcular los ingresos
“Hay que reconocer que hemos entrado en una etapa de mayores dificultades, de mayor incertidumbre”, admitió el diputado, entrevistado por Expansión antes de reunirse con los rectores de las principales universidades del país que le presentarían sus peticiones financieras.
Entre las dificultades que refiere están un menor crecimiento económico , una inflación que no cede como se esperaba, un dólar que se encarece, precios del petróleo a la baja y tasas de interés más altas.
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La multiplicación del dinero
El diputado que define a López Obrador como “una chingonería” es firme en decir que no se contratará más deuda y no habrá más ni nuevos impuestos.
La principal fuente de recursos para que el nuevo gobierno cumpla sus promesas se basará en tres leyes: la ley orgánica de la administración pública, la ley de austeridad (en proceso de aprobarse) y la de remuneraciones de funcionarios públicos, que ha sufrido un revés al ser congelada por la Suprema Cort e.
"Estas nuevas normas que nos estamos dando nos permiten garantizar que el gasto corriente, el gasto muchas veces suntuario entrará en una etapa de disminución y por el contrario inauguraremos una etapa donde el gasto de inversión en infraestructura tendrá ya desde ahora el inicio de una fase de crecimiento”, aseguró.
El monto que podría obtenerse de una redistribución y recorte del gasto rondará los 500,000 millones de pesos, dijo.
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El otro reto del presupuesto
Otro reto que el legislador ve en el presupuesto 2019 es el de acabar con un sistema corrompido, así como dignificar al Poder Legislativo.
"(Un sistema) muy opaco y discrecional que tenía como base la etiquetación de recursos para obras que en muchas ocasiones no tienen trascendencia (...) ese es uno de los principales retos independientemente del monto", asegura.
Sobre ajustes o recortes sólo dijo que será donde tenga que ser y que se terminará la fase de un gasto corriente acelerado con una inversión en picada.
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La gallina de los huevos de oro, en términos de ingresos, para el nuevo gobierno será la recaudación. “Se va a seguir sosteniendo la base principal de los ingresos no tanto en el petróleo sino principalmente en los ingresos tributarios”, precisó.
Y si los recursos no alcanzan Ramírez Cuéllar no descarta llevar a cabo un recorte al gasto.
"Ante cualquier caída de los ingresos la ley establece parámetros y nos indica dónde hay que recortar, dónde hay que disminuir gasto, dónde qué es lo que tenemos que tener prioridad que es lo que no se puede recortar”, advierte.
Al ser cuestionado sobre propuestas que plantearon otros diputados como el uso de las reservas internacionales, aseguró que no se tocarán.
"No, no, no, eso no, las reservas del Banco de México y la autonomía del Banco de México es intocable, no las vamos a tocar absolutamente para nada", aseguró.
