El banco dio a conocer que en el tercer trimestre del 2020 su utilidad neta tuvo una contracción de 8.8%, a 5,030 millones de pesos (mdp). La caída respondió a una estimación para riesgos crediticios extraordinaria compensada por sólidos ingresos por resultado por intermediación.
En cuanto a la cartera de crédito, Santander reportó un crecimiento de 5.4% en comparación con el tercer trimestre de 2019 a 735,330 millones de pesos.
"Nuestra cartera de crédito creció a un dígito medio año a año mientras que la demanda de hipotecas, créditos de auto y comerciales se mantuvo estable. Por otra parte, el crédito al consumo y pymes continuaron contrayéndose, en línea con las tendencias del mercado y las débiles condiciones del entorno nacional", destacó Grisi.
Los ingresos por intereses de Santander México durante el tercer trimestre fueron principalmente por los intereses de la cartera de crédito y comisiones por el otorgamiento inicial del crédito.
De julio a septiembre se generaron 19,898 millones de pesos y representaron el 72.3% del total de estos ingresos.
La morosidad del banco mostró una mejora al pasar de 2.33% en el tercer trimestre de 2019 a 2.09% en el tercer trimestre de este año.
El banco también destacó que en el tercer trimestre del año no hizo reservas preventivas debido a que consideraron que los 3,915 millones de pesos reservados en el segundo trimestre del 2020 fueron suficientes para hacer frente a la crisis e impagos.
