“Vemos nuevas condiciones geopolíticas, hay un riesgo significativo de una nueva Guerra Fría entre China y EU, entre China y probablemente el resto del mundo occidental, al respecto México puede aprovecharse de su cercanía con EU, de su mano de obra barata. Hay dos estrategias complementarias para tomar ventaja de las nuevas geopolíticas, México necesita mayor diversificación, ha dependido demasiado de EU, hay otro peligro, a EU le puede dar gripa como a Trump, y esto es otro peligro para países en todo el mundo, pero sobretodo para aquellos que dependen excesivamente de EU”, dijo en su ponencia Capitalismo Progresivo en la era Post-Pandemia.
La pandemia aceleró procesos como el uso de energías renovables y de la tecnología y reveló las ineficiencias en los servicios de salud pública. Los países deben flexiblizar el reparto de su gasto público sobre todo para la ciencia, el uso y desarrollo de tecnología, y para reforzar el sistema de salud, en materia de ingresos es necesario solventar la baja en la llegada de recursos por venta y producción de energéticos fósiles, en especial la petrolera, dijo Stiglitz.
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“El mundo se mueve rápidamente lejos del carbono, que es uno de los bienes importantes de México, una de sus fuentes de fortaleza más conocida. Tiene que desarrollar un sistema impositivo robusto, este ingreso de los combustibles fósiles va a desaparecer y no pueden tener una sociedad exitosa con el pequeño ingreso que obtienen de impuestos y su economía va a tener que cambiar esto”, dijo el también profesor de Economía en la Universidad de Columbia, Nueva York.
“Mi opinión es que el mundo va a comprometerse a la reducción de emisión de carbono, esto significa bienes abandonados en el futuro, el petróleo que va estar en el subsuelo en décadas no va a valer nada”, dijo.
El académico explicó que el modelo con base en la manufactura del sudeste asiático puede estar llegando a su final, y que México debe considerar estos cambios, pues el país ha crecido con base a modelos y políticas que han creado desigualdades.
El Nobel de Economía consideró que los países deben impulsar medidas para el crecimiento a largo plazo y que puedan lograr la buena distribución de la riqueza, porque esta contribuye al crecimiento económico, "al crear mayor igualdad se reduce la pobreza", añadió.
"Hay que reducir y atender las manifestaciones de falta de igualdad, hace más de una década el Banco Mundial cambió su enfoque de la pobreza, para atenderla. Los sistemas de protección social son los cimientos de una buena economía, eso va más allá de los proyectos considerados importantes, como caminos, electricidad, una buena economía combina buenos sistemas, arreglos constitucionales con buenos proyectos", dijo.
