"Frente a esta gran noticia, también necesito hacer esta declaración enfática y directa al pueblo estadounidense: el progreso por el que hemos trabajado tan duro puede revertirse", dijo.
Las muertes siguen aumentando en algunos estados, y los contagios también, advirtió Biden. Varios estados, entre ellos Florida y Texas, han levantado las exigencias de uso de mascarillas y otras protecciones contra el coronavirus, en momentos en que las autoridades sanitarias piden a los estadounidenses que tengan más cuidado.
"No retrocedan en los avances por los que tanto hemos luchado", dijo Biden. "Tenemos que terminar este trabajo, necesitamos que todos los estadounidenses... se mantengan en guardia en esta recta final", dijo.
Los nuevos casos de COVID-19 en Estados Unidos aumentaron un 9% hasta superar los 431,000 la semana pasada, la primera vez desde enero que los casos se incrementan durante dos semanas seguidas, según un análisis de Reuters.
En cuanto a su plan de infraestructuras, dado a conocer esta semana, Biden dijo que ya había hablado con los republicanos para tratar de conseguir apoyo para un proyecto de ley en el Congreso. El plan de la Casa Blanca, de 2.3 billones de dólares, incluye inversiones en banda ancha rural, hospitales para veteranos y escuelas, así como para carreteras y puentes.
"Creo que los votantes republicanos van a tener mucho que decir sobre si conseguimos hacer gran parte de esto", dijo.
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Los datos de las encuestas de Reuters/Ipsos publicadas el viernes muestran que las ideas del plan de Biden son muy populares entre los estadounidenses, incluida la subida del impuesto de empresas para pagarlo. Pero legisladores republicanos encuestados dijeron que no apoyarían el plan de infraestructuras "recientemente publicado por el gobierno de Biden".