Las voces que coinciden que no es posible tener una tasa de reemplazo de 100% aseguran que no es fiscalmente viable. Otros consideran que la reforma representaría un retroceso de 25 años.
Hay quien afirma que lo que el presidente busca, más allá de la aprobación, o no, de la reforma, es dominar la agenda en la primera mitad del año, es decir, durante el proceso electoral.
Quienes han dicho que sí es posible alcanzar la meta que propone López Obrador, apuntan a que se tiene que ser cuidadoso con las finanzas públicas y señalan algunas vías a través de las cuales sería posible que los trabajadores mejoren su ahorro para el retiro.
Para este año casi una cuarta parte del presupuesto federal (23%) será para el pago de pensiones: 1.99 billones de pesos.
Entre enero y noviembre de 2023, 17 centavos de cada peso se fueron a las pensiones, comentó Víctor Ceja, economista en jefe de Valores Mexicanos (Valmex).
¿Cómo aumentar el monto de las pensiones?
El 7 de enero, desde Agua Blanca, Veracruz, el presidente López Obrador anunció que presentará una iniciativa de reforma para mejorar el ingreso de los trabajadores al momento del retiro.
Lograr esta reforma es posible, pero requiere de cambios en diversas áreas para que pueda ser viable, sin descuidar el equilibrio fiscal para no presionar (más) las finanzas públicas.
Entre la información que se ha dado a conocer sobre este tema, es que el gobierno federal pondrá una parte “considerable” para el ahorro para el retiro de los trabajadores, así lo aseguró López Obrador en la conferencia mañanera.
Para lograr una tasa de reemplazo de 100% se requiere aportar el 25% del salario durante un periodo prolongado, comentó Ceja.
Ahora que el gobierno federal ha dicho que no se dejará a los empleadores la tarea de aumentar las aportaciones para el retiro, analistas consultados por Expansión señalan algunas puntos con los que se puede obtener más ingresos y, con ello, mejorar las pensiones.
El primer rubro con el que se pueden obtener más ingresos tiene que ver con una reforma fiscal que abarque tres puntos: el impuesto predial, un impuesto sobre la renta (ISR) más progresivo y cambiar el IVA de tasa cero a exenta, explicó Ceja.
Fomentar el ahorro voluntario y la formalidad. Es importante hacer que los trabajadores sean corresponsables de su ahorro para el retiro, que no dejen su futuro al gobierno o a las empresas.
El ahorro para el retiro está relacionada con la condición laboral de las personas, explicó Sofía Ramírez, directora de 'México, ¿cómo vamos?', siendo los empleados en esquemas formales los que más ahorran para el retiro, con un 88.9%, contra un 35.7% de quien labora en la informalidad.
En México, alrededor del 55% de la población económicamente activa labora en la informalidad.
Actualmente hay diversas modalidades de empleo, por lo que también se debe trabajar en mecanismos ágiles, fáciles de operar y amigables para que cualquier trabajador ahorre para su retiro, agregó Ramírez al tiempo de subrayar que, durante la vida laboral, una persona entra y sale constantemente de la formalidad.
Hay una tercera vía para aumentar el monto total que ahorran los trabajadores para su retiro sin que el gobierno o la iniciativa privada tengan que hacer el gasto: flexibilizar los regímenes de inversión de las Afores.
Por ejemplo, las Afores no pueden invertir más de 20% de sus recursos en valores extranjeros -como el S&P 500 de Estados Unidos-, tampoco pueden poner más de 60% en renta variable. “Hay bastantes restricciones y podría haber una forma de quitarlas. Ese impacto en el rendimiento esperado de los trabajadores podría ser algo no menor”, comentó Leonardo Castillo, director de productos para el retiro de Fintual.
Antes de la reforma de pensiones, la pensión que reciben los jubilados equivale al 48% de su último salario; con la reforma el porcentaje llegará a 72%, de acuerdo con datos de la Comisión Nacional de Ahorro para el Retiro (Consar).
Hay que tener en mente que el 15% de aportaciones para el retiro se alcanzará hasta el año 2030, por lo que los trabajadores que tendrán la tasa de reemplazo de 72% serán los que empiecen a laborar dentro de seis años.
Un estándar internacional deseable para la tasa de reemplazo es de entre 70% y 80%. Esto es lo que la OCDE recomienda a sus países miembros.
Cuando se hizo el cambio de la Ley 73 a la Ley 97 se esperaba que la densidad de cotización -el tiempo que se trabaja en el sistema formal durante la vida laboral- sería de 80%, es decir, 32 años de los 40 activos de un trabajador. Sin embargo, el porcentaje está más cercano al 50% que al estimado originalmente, señaló Castillo, de Fintual.
A decir de Carlos Serrano, economista en jefe de BBVA, "una tasa de reemplazo de 100% a toda la población fiscalmente no es viable, no ocurre en otros lugares del mundo", dijo al tiempo de apuntar que lo que se necesita eran mayores contribuciones, situación que se resolvió con la reforma de 2020.
Otro problema que se tendrá en el futuro es el bono poblacional. Los mexicanos están envejeciendo. Cuando la generación actual se retire, será la mayoría de la población total del país, contrario a lo que ocurría hace 40 años, recordó Iván Franco, fundador de la consultora Triplethree International.