Con el aprovechamiento del bono demográfico, México también quiere asegurar que tiene la capacidad de proveer el talento humano para el nearshoring.
Esta estrategia destaca en un momento en que el país tiene una buena proporción de personas entre 18 y 29 años, que es la que puede realizar estudios superiores, con un 22%, pero para 2030 se pronostica que se reduzca en 2 puntos porcentuales.
El grupo de 30 a 59 años, que es la edad laboral, tiene un buen tamaño, con un 38.1% de la población total.
Pero también es una realidad que la población de 60 años y más ha ganado terreno. En 1990 solo representaba 5.7% de la población; en 2024 es 12.4%; para 2050 se espera que incremente a 24.1%, y para 2070 a 34.2%.
Para el gobierno es necesario aprovechar y potenciar las capacidades del talento mexicano que está en edad de estudiar y, al mismo tiempo, generar las oportunidades laborales.
Ante esto, el gobierno emprendió acciones para modernizar la oferta educativa a través de la actualización de programas de estudio, la creación de nuevas carreras y la certificación extracurricular en habilidades del futuro.
Para México, la formación de técnicos, especialistas e investigadores en áreas STEM, de la mano de instituciones públicas de educación media superior y superior, así como de Centros Públicos de Investigación, va a significar fortalecer el desarrollo de vocaciones regionales.
Crece talento en áreas STEM
El gobierno identifica que, derivado de la actualización y ampliación de programas para las carreras del futuro, se tienen más egresados de las STEM a nivel licenciatura y posgrado.
En el ciclo escolar 2022-2023, el sistema público de educación superior registró un aumento de 3.7% en comparación con el ciclo anterior, fueron más de175,000 personas especializadas en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas.
Según los datos de la SEP, la ingeniería, la manufactura y la construcción está acaparando a este talento, pues 70.4% de los egresados se enfocó a estos campos, mientras que en tecnologías de la información y la comunicación representó 17.1%; en ciencias naturales, matemáticas y estadística fue 12.5%.
El talento especializado en ingeniería electrónica, industrial, mecánica, construcción y procesos químicos creció 4.2%.
La región centro-sur y oriente concentran a 72,456 de los egresados en STEM, seguida por el occidente, con 35,137.
México busca que la formación de este talento sea el pilar de las industrias que está empujando: semiconductores, electrónica, electromovilidad, dispositivos médicos y agroindustria.
Pero reconoce que un reto constante, que el sistema educativo debe enfrentar, es no quedar rezagado frente a los veloces cambios en las actividades productivas.
Para alinear los perfiles de los egresados con las habilidades y competencias que se requieren obliga a estrechar la coordinación entre los planteles educativos y los sectores productivos