OPEP
En caso de que los países exportadores de petróleo, encabezados por Arabia Saudita, hacen caso a la petición de Trump, el precio del barril podría bajar.
Sin embargo, “es probable que la OPEP evalúe las demandas de Trump en función de sus propios objetivos económicos y de mercado. Además, la relación entre EU y algunos miembros de la OPEP, como Arabia Saudita, es compleja y está influenciada por consideraciones geopolíticas que van más allá del mercado petrolero”, recordó Femat.
“Aunque la OPEP podría estar dispuesta a dialogar, es improbable que realice cambios significativos en su política de producción únicamente en respuesta a las demandas de Trump. Su objetivo ha sido tratar de mantener el precio del barril de petróleo en un rango de 80 a 100 dólares americanos por barril y que actualmente está cercano al límite inferior”, agregó.
Los analistas consideran poco probable que haya una baja en el precio del petróleo.
En el caso de una caída, esta podría ser de entre 15% y 30%, estimó Carlos Ochoa.
Matías Osorio apuntó: “vamos a tener volatilidad” y el precio del barril podría llegar hasta los 65 dólares. Subrayó que el costo de producción para las petroleras grandes es de 35 dólares, mientras que para las medianas es de 50 dólares.
¿Y el petróleo mexicano?
Para la Mezcla Mexicana de Exportación, precio ligado al mercado internacional, si las políticas de Trump incluyen una reducción de precios internacionales, también lo hará el hidrocarburo nacional.
“México es un exportador neto de petróleo, por lo tanto, una disminución en los precios podría afectar negativamente los ingresos del país por exportaciones petroleras”, adelantó José Carlos Femat.
“Además, la economía mexicana está altamente vinculada a la de Estados Unidos, por lo que las políticas energéticas y comerciales de Trump podrían tener repercusiones significativas en el sector energético mexicano”, añadió.
El gobierno mexicano, en el Plan Nacional de Financiamiento 2025, contempla una diversificación de portafolio y manejo de riesgos con el programa de coberturas con instrumentos financieros derivados.
Lo anterior par mitigar la volatilidad financiera producto de variaciones en los precios del petróleo. En el Plan Nacional de Financiamiento de ese año no se detallan las coberturas petroleras, pero se activan cuando el precio se coloca por debajo del estimado de la Secretaría de Hacienda.
Para este año, la estimación es de 57.8 dólares por barril de petróleo con un tipo de cambio a 18.7 pesos por dólar y una plataforma de producción promedio de 1.891 millones de barriles diarios.
El efecto de un dólar adicional en el precio del crudo sobre los ingresos petroleros es un aumento de 13,100 millones de pesos por exportaciones de crudo más. Por lo que por un dólar menor en su precio promedio significaría una pérdida igual para las finanzas públicas.
Además, una apreciación de 20 centavos en el tipo de cambio promedio reduce los ingresos petroleros por 8,300 millones de pesos. Y el efecto de un aumento de 50,000 barriles diarios de extracción de crudo sobre los ingresos petroleros es de 18,700 millones de pesos.
Con información de Dainzú Patiño y AFP