Por su parte, el profesor David Igual Molina, del Barcelona School of Management, indicó que no todos los aspectos que envuelven a las fintech debido al coronavirus son positivos.
“Llegó realmente una prueba de fuego para verificar sus resultados en todos los ámbitos: préstamos, asesoramiento de inversiones, pagos, etc. (...) Un aspecto problemático procede de una de las características que sufren todas las empresas en contextos de crisis como la falta de liquidez”, escribió Molina.
De acuerdo con el profesor, las fintech “viven al día” y recurren a nuevas rondas de financiación para mantenerse y crecer, por lo que pueden verse afectadas por la ralentización de la economía.
En tanto, Bonilla asegura que una vez que la situación comience a recuperarse, las empresas considerarán nuevas estructuras y mecanismos para la continuidad de sus negocios. Para lo que resta del año, el ejecutivo asegura que las fintech se verán afectadas en menor cuantía ya que pudieron reaccionar más rápido que los bancos y mantener su operación ante la situación.
“Para las fintech no es un caso tan trágico como lo es para otros negocios como los restaurantes, hoteles, centros educativos o aerolíneas en donde el escenario es blanco o es negro. Nosotros adaptando el producto con nuevas evaluaciones de adquisición, crédito y riesgo, podemos seguir adelante generando negocio y ayudando a nuestros clientes”, finalizó.