El nuevo esquema en el gobierno corporativo de Nissan fue recomendado por una comisión independiente que recibió el encargo de revisar a fondo las estructuras de poder, en medio de las quejas de los directivos nipones sobre la concentración de poder que tenía Ghosn cuando estaba al frente de Nissan.
El presidente de Renault, Jean-Dominique Senard, afirmó en la pasada Asamblea General en París que su compañía decidió echarse atrás al enterarse de la intención de Nissan de que el consejero delegado, Thierry Bolloré, no estuviera en uno de los tres comités de gobernanza.
Después avisó que bastaría con que la firma nipona cambiara de opinión, como así ha sucedido, para que ellos se pronunciasen a favor.
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Este nuevo acuerdo también abre la puerta a la posibilidad de una fusión de Fiat Chrysler, una operación con la que Renault coquetea desde hace unos meses.
Con información de Reuters