La producción que viene
BMW se prepara para una nueva etapa en la que ya no sólo comercializará sus unidades en México, también las producirá tras la apertura en junio de su nueva planta en San Luis Potosí, que la convierte en la décimo primera automotriz en sumarse a la lista de fabricantes en suelo nacional.
Lee: BMW arranca su nueva planta en San Luis Potosí sin temor a los aranceles
Las expectativas son grandes. Wehr estima que la planta, con una inversión superior a los 1,000 millones de dólares, tendrá una capacidad de producción anual de 175,000 unidades en un plazo de 16 a 24 meses, con lo que se colocaría en niveles similares a los Audi, que tuvo una producción de 173,098 en 2018.
En sus 300 hectáreas de superficie, se producirán vehículos como la nueva generación del icónico Serie 3, que abastecerá a mercados de todo el mundo.
Para el CEO de Latinoamérica, la penetración del sector del lujo en el mercado automotriz –de 3.6%, en abril de 2019– es baja en México, principalmente, por dos rubros: la inseguridad y las tasas de interés. “México, por su infraestructura económica y social, debería vender en el sector de lujo tres veces más. (…) En Latinoamérica es un factor relacionado, sobre todo, a la delincuencia; lo que llaman ‘mantener un bajo perfil’ es algo que frena al sector”, reconoce.