El gobierno federal, finalmente, llegó a un acuerdo con las empresas constructoras de gasoductos para destrabar el conflicto que inició la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en febrero, cuando el director del organismo, Manuel Barlett, levantó la voz sobre los costos que suponía para el erario público unos contratos por infraestructura que no estaba terminada ni en operación. Tras la negociación con las empresas, iniciada en julio, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció un ahorro de 4,500 millones de dólares para las arcas públicas.
El gobierno firma la paz con empresas de ductos y dice que ahorrará 4,500 mdd
Acompañado de los directivos de las empresas que participaron en la negociación, incluido el empresario Carlos Slim, ya que Grupo Carso es una de las compañías que está construyendo esta infraestructura; Carlos Salazar, presidente del CEE; Antonio del Valle, del Consejo Mexicano de Negocios, y Manuel Barlett, explicó que el contrato inicial tenía un costo para el gobierno de 12,000 millones de dólares. Ahora, se estableció una tarifa fija que permitió el ahorro señalado.
La primera empresa con la que se llegó a un acuerdo fue Grupo Carso. A ella le siguieron TransCanadá e IEnova. El gobierno sigue negociando con Fermaca.
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"Para la CFE, lo básico es la tarifa, porque la tarifa permite que la CFE tenga la capacidad para seguir invirtiendo. Se garantiza así la aceptación de las empresas", explicó Barlett. "Nos garantiza con esa disminución que la CFE pueda tener finanzas sanas y que la CFE pueda seguir invirtiendo", agregó.
Especialmente, en la península de Baja California y de Yucatán, las zonas prioritarias para el organismo.
El concepto de la tarifa fue clave en la negociación, señaló Barlett. "La discusión que tuvo lugar en estos meses fue definir el carácter de la tarifa. La CFE mantiene una tarifa baja para tener capacidad de inversión, los empresarios mantienen las inversiones en sus ductos. Y esto es una situación de ganar-ganar, la propiedad de los ductos se respeta y los propietarios tienen un beneficio inmobiliario de esos ductos".
El director de la CFE señaló que el principal cambio es que la tarifa cambia del concepto de construcción inicial a uno de transporte. "Es una tarifa de transporte de mercado. Se hizo una investigación integral de cuánto cuesta una tarifa de transporte en Estados Unidos, en Canadá e, incluso, en Europa Occidental. Y ese fue nuestro punto de partida", afirmó.
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La negociación se realizó según las condiciones de cada ducto. En algunos casos la reducción de la tarifa para las empresas fue de 33% al 38%, en otros, oscila entre el 19% y el 32%. Para compensar esta bajada, se aumentó el volumen de gas a transportar o los plazos del contrato, que en algunos casos incrementaron hasta los 30 años, frente a los 20 iniciales. López Obrador insistió en que, aun con el aumento del plazo del contrato, se mantiene el ahorro.
"En el caso del gasoducto marino (el Texas-Tuxpan), la tarifa, además de ser plana, supondrá un ahorro para el gobierno de 2,000 mdd. Se convierte en la tarifa más competitiva de transporte de gas natural si se compara con la alternativa, que es la ruta terrestre. El ahorro sería de la mitad", explicó Miguel Reyes, director de CFE Energía.
En el caso de Grupo Carso, Reyes señaló que no se incrementó el tiempo del contrato, pero sí el volumen de gas natural transportado en 40%. Con este acuerdo, la tarifa bajó en promedio 47 centavos por pie cúbico y un ahorro de 38%.
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Slim rechazó que hubiera abusos o corrupción en los contratos firmados durante el sexenio anterior. "En el contrato anterior eran pagos crecientes, en la propuesta y acuerdo de hoy son pagos parejos. Eso significa que podemos negociar mejores condiciones con los bancos porque nuestro flujo es mayor. Desde el punto de vista financiero nos permite conseguir más crédito a mejor tasa para seguir invirtiendo", señaló. "Con las tasas de interés de hoy, que son bajas, conviene pagos parejos".
El gasoducto marino construido en conjunto por Transcanada y IEnova sí recibió una extensión de 10 años en su contrato.
“Por medio de este acuerdo, se establece una nueva estructura de tarifas y se extiende el plazo de los contratos por 10 años. Dichos acuerdos satisfacen los intereses de ambas partes y permiten un beneficio para CFE, conservándose la integridad de los contratos”, explicó IEnova en un comunicado de prensa.
El gobierno también se comprometió a apoyar el reinicio de las operaciones en el gasoducto Guaymas-El Oro para solucionar los conflictos con la comunidad Yaqui.
“Con este acuerdo, las partes trabajaran conjuntamente para tomar las acciones legales necesarias que pongan fin a los procesos de arbitraje internacional de los gasoductos señalados y se otorga certidumbre a los contratos correspondientes”, dice la firma.