La Comisión Federal de Electricidad (CFE), que dirige el octogenario político Manuel Bartlett, ha lanzado una batalla en contra de una serie de contratos para la construcción de gasoductos que, bajo su visión, resultan “leoninos” para la eléctrica nacional. ¿El motivo? La CFE pagó cerca de 5,800 millones de pesos el año pasado por infraestructura que no estaba terminada debido a las llamadas cláusulas de fuerza mayor y caso fortuito.
Estas cláusulas, que están detrás de la solicitud de arbitraje internacional y la negociación iniciada entre la eléctrica nacional y las empresas que obtuvieron el contrato, señalan que el gobierno debe pagar cuando se demuestre que los proyectos están detenidos por cuestiones sociales, ambientales o políticas.