La quiebra de la agencia de viajes más antigua del mundo, la británica Thomas Cook, va a afectar a cerca de 600,000 turistas alrededor del mundo, entre ellos los que contrataron paquetes para visitar la Riviera Maya y Cancún en México, que se encuentra entre los destinos populares de esta compañía.
Estos turistas han quedado varados desde este lunes tras el anuncio de la insolvencia de la compañía, una marca que comenzó a operar en 1841, y que ahora acuden a sus embajadas en busca de auxilio para saber cómo regresaran de sus vacaciones donde se han visto sorprendidos por este cese de operaciones.