Cancún era uno de los destinos que mayor ofertaba la agencia de viajes Thomas Cook y aun cuando se declaró su quiebra y el cese de operaciones el lunes, la industria turística mexicana no se verá afectada, asegura la Secretaría de Turismo (Sectur).
La Sectur y los hoteleros niegan afectación en México por quiebra de Thomas Cook
La Riviera Maya y Cancún se encontraban entre los destinos más populares de la agencia, la más antigua del mundo, cuya quiebra va a afectar a cerca de 600,000 turistas alrededor del mundo. Sin embargo, la dependencia explicó en un comunicado que la temporada más alta para la firma era de abril a septiembre de este año -con el 70% de su oferta-, por lo que la pérdida de las reservaciones en el destino de octubre a diciembre de este año sería de 23 millones de dólares, lo que representaría apenas el 0.1% de los ingresos anuales totales del sector.
Pablo Azcárraga, presidente del Consejo Nacional Empresarial Turístico (CNET), comentó que aunque el daño no sería grave para el sector turismo, sí existirá una leve afectación, dado que el mercado inglés es el tercero más importante para México, por detrás de Estados Unidos y Canadá.
"Además, este es un reflejo de cómo el turismo es una industria difícil, es una industria competitiva que ha tenido grandes cambios importantes debido a las transformaciones tecnológicas. Cuando hay empresas que se ven afectadas por la forma en que el consumidor adquiere un producto o elige sus viajes, debemos pensar en incorporar la tecnología para ser más competitivos", explicó.
La agencia Thomas Cook ofertaba anualmente un promedio de 112,864 asientos de avión, apuntó la Sectur. De enero a julio de este año se realizaron 401 vuelos con un total de 122,894 pasajeros.
"Podemos señalar que en todo 2018, Thomas Cook generó ingresos para México, por el gasto de turistas, de 100 millones de dólares. Esta cantidad corresponde a una participación marginal de solos el 0.4% del ingreso total de divisas por turismo que el país recibió el año pasado", informó la dependencia.
Conrad Bergwerf, presidente de la Asociación de Hoteles de la Riviera Maya agregó que trabajan con la autoridad de aviación civil de Reino Unido para apoyar a los turistas que se encontraban hospedados en diferentes instalaciones de la zona, con el propósito de evitar que quedaran varados.
Desde el lunes, cuando se declaró la quiebra de Thomas Cook, también el Aeropuerto Internacional de Cancún comenzó a utilizar la Terminal 4 del complejo para el traslado de ciudadanos ingleses a través de aerolíneas como Aeroméxico, Virgin y British Airways.
La empresa acumulaba una deuda de 2.100 millones de dólares y necesitaba vender tres millones de vacaciones al año solo para cubrir los pagos de intereses. Aunque presentó un plan de reestructuración con el que el conglomerado chino Fosun habría tomado el control de sus actividades, los 1,120 millones de dólares prometidos por las partes no eran suficientes. La compañía necesitaba otros 250 millones para continuar con sus actividades.