La agencia desconfía de la habilidad de la compañía para mejorar sus resultados, debido a que cuenta con una cartera de campos en estado avanzado de explotación, falta de capital suficiente para invertir en exploración y producción y el mandato de expandir su negocio de refinación, donde la calificadora espera que continúe generando pérdidas operativas, además de ser vulnerable a las tendencias de la demanda en el mercado de petróleo y gas en el mediano tiempo.
Moody’s también desconfía de que, a pesar de que Pemex dicen haber logrado una sustitución del 100% de sus reservas en 2019, pueda lograrlo para 2020 y 2021. "La empresa deberá incrementar su deuda en 2020 para invertir y lograr las metas del gobierno y Pemex de mantener las metas de una producción estable desde los niveles que logró en 2019", dice la firma.
“El factor diferenciador es que ya son dos las calificadoras que la han bajado a un grado especulativo. Fitch lo había hecho desde junio y ahora se une Moody’s. A nivel de los portafolios de inversión que siguen a emisores de grado de inversión, se activan reglas que les impiden a estos fondos invertir en emisores que cuenten con dos agencias calificando al bono con grado de inversión especulativo”, dice Víctor Gómez Ayala, subdirector de análisis Económica de Casa de Bolsa Finamex
Los papeles de Pemex en el mercado anticipaban esta degradación desde hace semanas, donde los bonos de Pemex tocaron un diferencial de 900 puntos en su tasa de interés frente a la deuda soberana, el mayor en su historia. Así que es previsible que varios fondos hayan salido de la deuda de Pemex en días pasados, aunque ahora sus costos para financiarse se incrementarán, dice el especialista.
“Para Pemex esto se complicó de una manera exponencial. Ya estaba en un nivel donde los costos financieros se elevaban, y ahora las alternativas para salir de este laberinto son más reducidas”, dice Gómez.
Pemex está considerada la empresa petrolera más endeuda del mundo y, aunque ha logrado reducir el monto desde el año pasado, aún pesa sobre ella pasivos financieros de casi 102,000 mdd de deuda financiera neta, según cifras al cierre del cuarto trimestre.