Aunque los modelos eléctricos aún representan un número pequeño, comparado con los miles de unidades a gasolina que se venden en el mercado mexicano (195 frente a 509,318 entre enero y julio), JAC ha logrado lo que ninguna otra marca en el mercado hizo: convencer a los clientes de pagar hasta el doble por un modelo a baterías, comparado con su versión a gasolina.
"La mayoría de las marcas ha lanzado modelos eléctricos montados sobre plataformas únicas, que no tienen un equivalente a gasolina, pensando en que el cliente de un eléctrico no quiere que confundan su autos en la calle, sino que lo reconozcan por tener un coche eléctrico. Sin embargo, esta exclusividad genera un mayor costo de producción y reparación, en tanto que no se genera la economía de escala que sí se logra con los modelos a gasolina”, dice en entrevista Isidoro Massri, director de Marca JAC para México.
Contrario a este modelo de negocio, el fabricante chino ha decidido apostar por el volumen y lanzar versiones eléctricas de varios de sus modelos a gasolina.
Al final del año pasado, la empresa presentó cinco vehículos eléctricos: un subcompacto, tres SUV y una pickup, con una autonomía de entre 320 kilómetros y hasta 400 kilómetros en modo ECO para los modelos más pequeños, y de hasta 500 kilómetros por carga en los más grandes.
En febrero, arrancó la comercialización de los modelos a baterías en siete agencias. En julio toda la red, las 32 agencias a nivel nacional, ya cuentan con vehículos demo, cargadores y técnicos capacitados para realizar los servicios y reparaciones.