A éstas les siguieron las dos rutas operadas por Viva Aerobus hacia Monterrey y Guadalajara, mientras que los dos vuelos de Aeroméxico a Mérida y Villahermosa tuvieron el menor desempeño. Destaca el caso de Villahermosa, que tuvo un promedio de apenas 20.1 pasajeros diarios.
En este periodo, parece que la capacidad de los aviones ha ido acorde a la demanda de cada ruta.
En el caso de Cancún, por ejemplo, Volaris opera un Airbus A320, con una capacidad de alrededor de 180 asientos, de los que la aerolínea llenó un 88% en promedio. De manera similar, Aeroméxico ha operado su ruta a Mérida con un Embraer E190 de alrededor de 88 asientos, que ha llenado un 78% en promedio.
Al respecto, Fernando Gómez Suárez, analista del sector aéreo, considera que el desempeño de rutas como Cancún y Tijuana responde a que, incluso antes de la pandemia, se encontraban 10 mayores rutas del país, y que a la fecha han superado el tráfico de pasajeros pre COVID-19.
“Siempre con incorporación de nuevas rutas es ensayo y error. Normalmente siempre se hacen estudios de mercado previos; en el AIFA supongo que los habran hecho y estipularon esas rutas porque con otras sería más complicado”, explica.
Esto también explicaría que Aeroméxico hiciera ajustes a 12 días de haber iniciado operaciones en el AIFA, al pasar de un vuelo diario a tres frecuencias semanales en Villahermosa, e incorporar un nuevo vuelo a Puerto Vallarta a partir de mayo, que, contrario a Villahermosa, estaba entre las rutas de mayor demanda antes de la pandemia.
De hecho, cinco de las actuales rutas del AIFA son las cinco rutas con el mayor tráfico de pasajeros antes de la pandemia desde el centro del país, mientras Puerto Vallarta ocupó la octava posición del top 10 de conexiones en 2019, según datos de la AFAC.
A corto plazo el panorama no parece alentar a las aerolíneas para la apertura de nuevas rutas. Según datos de la plataforma OAG, entre abril y hasta finales de julio, las aerolíneas tienen programados seis vuelos diarios en promedio, en comparación con los cerca de 900 vuelos diarios en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, tomando en cuenta los dos vuelos mensuales de la aerolínea venezolana Conviasa, que no reportó datos de tráfico a la AFAC.
Para Gómez Suárez, es probable que las líneas aéreas mantengan su actual presencia en el AIFA mientras no se les ofrezcan estímulos para volar en el aeropuerto, aunado a una promoción del complejo. “Si seguimos esperando pasivamente, sin hacer nada, no se va a lograr”, concluyó.