“Hacemos un llamado para que la citada Secretaría pueda participar como postor para adquirir todos los bienes que alguna vez fueron de Interjet, y que éstos sirvan su propósito de poner en funcionamiento la línea aérea que le podría dar oportunidad a los trabajadores de Interjet de sumarse a ella”, dijo Francisco Joaquín del Olmo, director de la Sección 15, citado en el documento del que Expansión tiene una copia.
La propuesta del sindicato de Interjet se dio luego de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación negara una revisión sobre la sentencia dictada por el Tribunal Colegiado que obliga a la aerolínea a pagar salarios y prestaciones por alrededor de 1,800 millones de pesos.
Con ello, los directivos de la empresa se quedan sin recursos para ampararse contra la determinación de la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje.
“La Junta Federal de Conciliación y Arbitraje tampoco tiene obstáculo alguno para nombrar a un perito valuador, realizar el avalúo de los bienes embargados a Interjet, y ordenar su remate para que los trabajadores puedan cobrar los montos que se les adeudan”, agrega el documento de la Secciónn 15.
De acuerdo con información filtrada a raíz del hackeo de la Sedena, que posteriormente fue confirmada parcialmente por el presidente Andrés Manuel López Obrador, la aerolínea de la Sedena tendría una flota de 10 aviones, entre los cuales estaría el ex avión presidencial Boeing 787 Dreamliner, que ha estado en la venta por más de tres años.
Sin embargo, para poner en marcha a una aerolínea que sea operada por un concesionario aeroportuario, se tendría que cambiar la Ley de Aeropuertos, que impide que un operador aeroportuario tenga la concesión para ofrecer servicios de transporte aéreo.
Además, el arranque de una nueva empresa requeriría de una adecuación presupuestaria para el siguiente ejercicio fiscal, pues la intención del presidente López Obrador es que inicie operaciones en 2023.