El boom de los motores turbo
A pesar de que los calendarios establecidos por los países para la eliminación gradual de los motores de combustión interna, estos seguirán siendo la principal fuente de energía en la próxima década. Además, aunque los vehículos electrificados están siendo apoyados por incentivos, aún tomará tiempo para que su adopción se generalice. Se espera que cada vez más fabricantes de vehículos recurran a este tipo de motores como una alternativa para reducir las emisiones de sus unidades.
Datos de la firma de análisis Straits muestran que en 2021, el mercado global de turbocompresores se valuó en 27,350 millones de dólares y la expectativa es que alcance los 50,365 millones de dólares en 2030, lo que representa una tasa de crecimiento anual compuesta (CAGR) del 7% durante el período de pronóstico.
China domina la demanda de turbocompresores en Asia Pacífico debido a los niveles de producción en masa de automóviles en el país y a la necesidad de reducir las emisiones contaminantes en la siguiente década.
“Los motores turboalimentados ahorran combustible, brindan una potencia más fuerte y son mejores para el medio ambiente que los motores de aspiración natural, por lo que son populares en China”, dice Eric Yang, gerente de producto de Jaecco, una nueva marca de SUV que llegará al mercado mexicano a mediados de año.
Algunos fabricantes chinos habían optado por ofrecer motores de aspiración natural, en mercados en vías de desarrollo como Latinoamérica, como una alternativa más económica y menos compleja que los motores turbo. Sin embargo, a medida que arrecia la competencia, los motores turbo se han convertido en un factor diferenciador frente a otros competidores ya establecidos en cada uno de los mercados.
En México, por ejemplo, Volkswagen ha apostado en los últimos tres años por los motores turbo de tres cilindros. Los modelos Nivus, Taigun y Virtus cuentan con este motor y la nueva generación de Polo también podría incluirlo.
La oferta de motores turbo de Chirey y Omoda: 1.0, 1.5 y 1.6 litros
Chirey, que hizo su debut en el mercado mexicano a mediados del año pasado, integra un lineup de motores turbo que incluyen un 1.5 litros turbo que produce 154 hp y 169 lb-pie y un 2.0 litros turbo de 250 hp y 287 lb-pie. Este año lanzará tres modelos más y todos ellos contarán con motorizaciones turbo. El primero de ellos, el SUV subcomacto Tiggo 2, tendrá un motor turbo de tres cilindros y 1.0 litros, calibrado a 101 hp.
Por otro lado, Omoda, la segunda marca del Grupo Chery, llegará al mercado mexicano a mediados de mayo, también lanzará tres modelos este año, con un lineup de motores turbo de 1.5 y 1.6 litros.
Jaecoo también ingresará al mercado mexicano con el lanzamiento de un SUV compacto denominado J7 a finales del verano. Para diciembre, la marca china tiene previsto presentar su segundo modelo en México, un SUV mediano llamado J9. Jaecoo solo ofrecerá motores turbo en el mercado mexicano.
En México, Grupo Chery ha comercializado unos 14,000 unidades de su marca Chirey, desde su lanzamiento en julio de 2022. La marca cerró el primer trimestre del año con alrededor del 3.2% de la participación del mercado. Con el lanzamiento de Omoda y Jaecoo, la armadora china espera conquistar 5% de participación.