"Fue un gran desafío porque necesitábamos reforzar significativamente nuestra orientación hacia el cliente. Anteriormente, operábamos con dos enfoques distintos y tuvimos que consolidarnos en uno solo", comentó López. "Nuestra prioridad principal era potenciar nuestra propuesta de valor para nuestros consumidores, y la única manera de lograrlo fue optimizar todas nuestras operaciones", agregó.
Sin revelar si las marcas de Henkel -como Persil, Más Color y Kuul- han ganado cuota de mercado desde la fusión, el presidente de la empresa en México explicó que el 55% de las ventas corresponden a la división de consumo masivo, mientras que el 45% restante proviene del negocio de adhesivos.
"Aunque la parte de adhesivos experimentó un leve estancamiento, logramos alcanzar los resultados esperados, con un crecimiento orgánico superior al 3%", añadió López durante una entrevista con Expansión.
Fusionar en lugar de separar
Con la fusión de la empresa en dos divisiones, la operación en México se convierte en un punto de convergencia entre dos regiones: la de adhesivos industriales, que reporta a Estados Unidos, y la de consumo masivo, que se integra con América Latina.
Valentín López detalló que entre el 10% y el 15% de la producción de adhesivos industriales en México se envía a Estados Unidos y América Latina, mientras que la mayoría de las marcas de consumo, como detergentes, se destinan al mercado local, y los productos de belleza se distribuyen hacia Centroamérica.
Uno de los pilares para la integración de las operaciones en México, según López, es el centro de distribución adquirido por la empresa en Toluca en 2021, que cuenta con 86,000 metros cuadrados. Esto ha permitido mejorar la cadena de suministro de la empresa, ya que aunque cada división mantiene su proceso de manufactura separado, la distribución ahora se realiza a través de un solo canal para los productos de gran consumo.
En 2023, año de la fusión, Henkel cerró con ingresos globales por 21.5 millones de euros, lo que representó una disminución del 3.9% respecto a los 22.4 millones de euros en 2022. Sin embargo, el crecimiento orgánico de las ventas durante el año fue del 4.2%, según su informe financiero anual.
En México, el crecimiento de los ingresos de Henkel fue de dos dígitos, alcanzando los 965 millones de euros. Valentín López señala que estos resultados financieros cumplieron con las expectativas de la compañía.
Henkel fabrica una amplia gama de productos que incluyen suavizantes, detergentes, productos de limpieza, productos para el cuidado del cabello, corporal, de la piel, bucal y fragancias, así como adhesivos de uso industrial para sectores como la industria automotriz, de consumo, farmacéutica y calzado. La empresa cuenta con nueve fábricas en México, tres ubicadas en Guadalajara, cuatro en Toluca, una en Salamanca y otra en Guadalupe, Nuevo León.
Apuesta sustentable
Henkel, fundada en Alemania en 1876, inicialmente se dedicaba exclusivamente a la producción de un detergente elaborado a base de silicato. Desde entonces, la empresa ha ampliado su cartera de marcas para incluir productos como Más Color, Persil, Kuul, Authentic Beauty Concept (ABC), Schwarzkopf, Dixan y Pritt, entre otras. Estas marcas se introducen en el mercado con el objetivo de promover un consumo más responsable entre los consumidores.
La compañía ha puesto un fuerte énfasis en la sostenibilidad como uno de los puntos clave que la distinguen de otros competidores en el mercado, especialmente en el sector de gran consumo, donde empresas como Univer o Johnson & Johnson también están presentes. Por lo tanto, las inversiones se centran en la mejora de los procesos productivos con el fin de reducir la huella de carbono en un 65% para el año 2025.
"Nosotros solo empleamos materias primas que tienden a ser más sostenibles, y este enfoque lo hemos estado adoptando desde hace muchos años. Hoy en día, la preocupación por la sostenibilidad es aún mayor y cada movimiento que realizamos en este sentido se guía por nuestro plan global de sustentabilidad", señaló López.