Los inversionistas dejan de tomar café: está en su precio más bajo en una década
CIUDAD DE MÉXICO. - Hay quien no puede vivir sin él, pero la sobreproducción ha llevado al café a registrar precios mínimos en los últimos 13 años y, como consecuencia, las personas que invierten en el mercado se han alejado de este aromático grano.
El precio del café arábica -que representa 63% de la producción mundial- en el mercado de commodities se cotiza en alrededor de 93 centavos de dólar por libra (17.6 pesos por casi medio kilo), su nivel más bajo desde diciembre de 2005, de acuerdo con datos de Bloomberg.
“Se debe a un incremento en la producción, que se ha generado desde 2011, cuando el precio del café estaba en sus precio máximo (3.04 dólares por libra) en casi 15 años”, explica Jaime Ascencio, analista de Bursamétrica, sobre la caída.
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Al cierre de 2018, la producción de café fue de 168.1 millones de sacos (de 60 kg); mientras que el consumo fue de 165 millones, es decir, hay más café en el mercado que el que se está consumiendo, de acuerdo con un informe de la Organización Internacional del Café.
Los principales países donde se ha registrado un alza en la oferta de café son Brasil, Colombia, Indonesia y Vietnam. Ascencio señala que las grandes compañías han absorbido a otras empresas y se han generado conglomerados de cafetaleros. Esto ha creado escalas de producción que han reducido los costos, castigando los ingresos de los pequeños productores, que son quienes les venden.
La caída en los precios del café no le pega a las grandes firmas, porque al vender a un precio más bajo, ganan mercado y venden más: ganan con volumen, no con precio.
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La situación para los pequeños productores parece que podría mejorar en el corto plazo. "Seguimos siendo favorables al repunte en el precio, tanto para el café arábica como para el robusta", comentó en un reporte Geordie Wilkes, jefe de investigación de la consultora Sucden Financial.
El especialista espera que para la temporada 2019-2020 se registre un déficit de 5.4 millones de sacos en el mercado de café, a medida que va descendiendo la producción de Brasil. La previsión es que caiga 13% en esta temporada.
